lunes, 11 de julio de 2016

Historia de Catalunya (La "biga" y la "busca" [II])

Alfons V "el Magnánim" era consciente de la coincidencia de intereses con los buscaires al compartir el mismo enemigo conjunctural: la oligarquía urbana, opuesta tanto a las pretensiones preeminentes de la monarquía como la política reformista de los "buscaires. Desde Nápoles, Alfons V "el Magnánim" encargó la resolución del conflicto a sus lugartenientes generales, primero la reina María y después Galceran de Requesens. Los "buscaires" agruparon en el "Sindicato dels Tres Estaments" (1452). Pero aunque los "buscaires" estaban organizados, seguían sin acceso al poder municipal. El 30 de noviembre de 1453, fecha en que el Consell de Barcelona había que renovar la conselleria, el lugarteniente general Requesens suspendió las elecciones a consejeros y nombró una nueva conselleria "buscaire" en una acción que hoy se consideraría un golpe de estado. Con este cambio político, se implantaron las medidas tradicionalmente reivindicadas por "buscaires": medidas proteccionistas de la producción propia, defensa del comercio marítimo (acta de navegación de 24 de agosto de 1453), devaluación de la moneda (decretada el 4 de enero de 1454), saneamiento de la administración municipal (rebaja de los sueldos de los funcionarios e investigación de fraudes y corrupción de los "bigaires"), todo con el objetivo de favorecer los productos propios frente a los importados. Una representación de la Generalitat de Catalunya, dominada por la "Biga", viajó a Nápoles a protestar ante el rey. Para dar una cobertura legal adecuada, Alfons V "el Magnánim", concede un nuevo privilegio de regulación de la ciudad (1455) que repartía de forma fija la composición de los órganos de gobierno municipal entre los diversos estamentos. Los jurados del "Consell de Cent", que siempre serían 128, se repartían en cuatro grupos de 32, cada uno formado por miembros de un estamento (ciudadanos honrados, mercaderes, artistas y artesanos). El "Trentenari", formado por 32 miembros, se dividía en cuatro grupos de ocho, uno por cada estamento. Finalmente, el poder ejecutivo de los consejeros se distribuía de la siguiente manera: "el conseller" y el "conseller segon", por los ciudadanos honrados; el "conseller tercer", por los mercaderes; el "conseller quart", por los artistas; y el "conseller cinqué", por los artesanos.
Sin embargo, el programa de cambios "buscaire" no tuvo éxito debido a la oposición enconada de la "Biga" y la preminencia que se había dado en el reparto de cargos a los consellers de la "Biga" respecto a los de la "Busca". Además, la "Biga" consiguió el apoyo de la oligarquía rural y la nobleza laica que habían sido perjudicados por el hecho remensa (payeses), reforzándose para hacer frente a la monarquía que había desafiado sus privilegios. En 1462, al estallar la guerra civil catalana, los "bigaires" pudieron recuperar el poder. Al terminar el conflicto (1472), la "Capitulacio de Pedralbes" no castigó a los instigadores para tener una paz perdurable, con lo que la "Biga" continuó en el gobierno municipal. Fue Fernando II, más adelante quien inició la reforma del "Consell de Cent".

No hay comentarios:

Publicar un comentario