miércoles, 10 de agosto de 2016

Historia de Catalunya ("la Jamancia" [VI])

La noche del 11 al 12 de septiembre en medio de una fuerte tormenta salió de Barcelona una columna de más de 2.500 hombres según las fuentes, entre francos, milicia y unos 200 de tropa, con Ametller a su frente, atravesando entre Gracia y el Clot donde la tropa se replegaba de noche pasaron inadvertidos rodeando Sant Andreu del Palomar pueblo a una hora de Barcelona. Allí había restos de oficiales y soldadesca sobrantes de la Ciutadella que trasladados allí no habían establecido guardias. Sorprendidos muchos fueron capturados ochenta oficiales y otro tanto de soldados, que fueron desarmados. Obligados los primeros por su palabra de honor, fueron conminados a ir hasta Mataró, ciudad que se había levantado del lado de Barcelona. En esta maniobra fue fusilado el capitán Juan Cadena, para tener comisión contraria al pronunciamiento, y otro fue muerto por querer robar algunos caudales cuando las tropas de Ametller las cargaban para llevarlos a Mataró. Después de tres días en Sant Andrer, Ametller partió hacia Mataró, dejando a Martell con un destacamento de unos mil hombres en Sant Andrer. Al paso de Ametller iba pronunciando los pueblos por donde pasaba. Entre el 11 y el 23 sólo hubo 5 bajas entre muertos y heridos en Barcelona.
El capitán general Miguel de Araoz releva al capitán general el 16 de septiembre, y afirma que disponía de fuerzas suficientes para estrangular la rebelión. El día 18 se decidió a tomar la ofensiva. Al día siguiente una columna de 3.000 hombres dirigida por Joan Prim se dirigió a atacar las fuerzas de Sant Andreu. Ese día la lluvia había parado, aún así Ametller que conoció los movimientos de Prim cruzó el Besòs improvisando un puente con carros. A las fuerzas de Ametller que había llegado a Mataró se le habían unido 800 hombres comandados por Francisco Ballera procedentes de la provincia de Girona. Del lado sur del Besós se estableció un combate entre las tropas de Ametller y Delgado, pero falto de caballería y artillería el primero e impedido por un terreno embarrado y el ataque de artillería de Prim tuvo que volver a cruzar el Besós. Las fuerzas de Prim también trataron de atacar Sant Andreu siendo rechazadas, resultando en ochenta bajas entre muertos y heridos y 21 prisioneros entre las tropas del gobierno de Madrid y 20 bajas entre las filas de los pronunciados.
El brigadier Juan Delgado volvió a atacar Sant Andreu el día 22 que tomado al asalto en un combate de tres horas dejó un balance de poner en fuga a los 1.500 hombres mandados por Martell, 200 prisioneros, habiendo tenido la pérdida de seis muertos (entre ellos el comandante de Guias Juan Siscle), 39 heridos (entre ellos Lorenzo Milans del Bosch) y 22 contusionados. En esta acción Ametller no intervengué directamente sino que auxilia la huida de las tropas sublevadas de Sant Andreu. Asimismo desde Barcelona una salida de unos 400 hombres propicia una maniobra de distracción para auxiliar a los combates de Sant Andreu. No obstante, fueron contrarrestados por el bombardeo y tiroteo desde la Ciutadella y por un batallón de la Constitución que salió de ésta.
Tras esta acción se dirigieron tres columnas una hacia Girona al cargo de Ametller con mil hombres, otra de 700 hombres comandada por Martell dirigida hacia el Camp de Tarragona y otra en el cargo de Riera que intentó progresar hacia Barcelona para Sant Cugat del Vallès. Esta columna fue rechazada por un destacamento avanzado de las tropas fieles estacadas en Gràcia. Al cargo de José María Montañá y Romá, secretario de la Junta había salido una columna de un 150 hombres que se dirigieron a Martorell a propagar el movimiento, entrando el día 18. El día 21 habiéndose organizado el somatén con vecinos de Martorell y de los pueblos de alrededor. Este dirigido por Antonio Baixeras que comandaba unos sesenta hombres les obligó a huir, capturando al mismo Montañá y una cincuentena de hombres. Respecto a la columna de Martell quedó desamparada de la ayuda de la ciudad de Reus que estando en poder de los pronunciados había caído en una mano llevado a cabo por el comandante general de la provincia de Tarragona Cristóbal Linares con dos batallones y seis piezas de artillería. Martell falto de fuerzas de apoyo su columna sufrió la deserción de cincuenta hombres que huyeron en Tarragona y en último término se entregó toda la columna huyendo Martell con ocho de los cabecillas.

Historia de Catalunya ("la Jamancia" [V])

El día 8 un repique de campanas iniciado a las once de la mañana anunció que Girona se había compuesto una junta de pronunciamiento compuesta por Ramón Cabrera, Francesc Maranges, Marti Parelols y Lorenç Autet. Esta nombró a Francesc Ballera comandante general de la provincia. Figueres secundaria también el movimiento hecha por el batallón de Milicia Nacional y la compañía de zapadores. Temiendo una incursión desde la Ciutadella en la ciudad los sublevados ocuparon el Paseig de Sant Joan (espacio que separaba las casas de la Ciutadella), que tras el hostigamiento de fusilería efectuadas desde la Ciutadella, tuvieron que abandonar después de la muerte de un sargento y algunos heridos (cuatro entraron en el hospital, habiendo muerto uno). Aquella noche los pronunciados hicieron una salida por la Porta de Sant Antoni una salida intentando de nuevo "un golpe de mano" sobre Sarrià o Gracia, pero batidos por las granadas lanzadas desde Montjuïc y el tiroteo de las avanzadas leales al gobierno junto con un aguacero intenso , entraron de nuevo en la ciudad.
A la una de la tarde del día 9 el coronel Joan Martell entró en la ciudad acompañado de sus "edecanes" y caballería, entrando a galope hacia la Plaça de Sant Jaume (o de la Constitución), con el sable en la mano y gritando "Visca la unio i la llibertad". Tras reunirse con la junta fue a la fonda de las "Quatre Nacions de les Rambles" donde hubo un banquete con brindis y saliendo a continuación en el balcón para pronunciar un discurso en la concurrencia dando vivas a la junta central, a la independencia nacional, a la reina y al pueblo soberano, ante una multitud. Después de la comida Martell acompañado de algunos miembros de la junta y una veintena de hombres del escuadrón de Milicia Nacional hasta el pueblo de Sants donde reunió unos ochenta hombres que lo acompañaron de nuevo dentro de la ciudad.
El día 10 Ametller llegó a Sant
s con una división. En ese momento reveló a sus comandantes la intención de ponerse del lado de los sublevados y estos no estuvieran de acuerdo, abandonándolo y llevándose los respectivos batallones. Así pues, Ametller, sólo le acompañaron dos batallones de francos, y unos doscientos hombres del ejército (entre 1.000 y 1.500 hombres) en el interior de Barcelona. Ametller fue a la plaza de la Constitucio (Plaça Sant Jaume) donde junta en el palacio de la diputacio, sede de la junta central, salió al balcón acompañando a Martell y otros cabecillas revolucionarios, Rafel Degollada hizo un discurso justificativo del alzamiento contra el centralismo, que Hostalric se había pronunciado, en su nombre el coronel Juan Pablo Par. Ametller afirmó que "no había más que dos partidos los liberales y los serviles" que los centralistas pertenecían al primero y que antes de consentir el triunfo de los serviles prefería sepultarse con sus camaradas entre las escombros de la ciudad, concluyendo con los gritos de "muera Cristina, mueran los Narváez, mueran los Conchas, mueran los tiranos". La Junta Central decretó ese mismo día que Juan Prim era traidor y nombró a Ametller mariscal de campo y capitán general de Catalunya.
Durante esos días se seguía publicando en Barcelona "El Constitucional" (diario prorevoltats que a veces exageraba las posibilidades de la revuelta), también había activo el diario de avisos. La tropa que se había separado de Ametller, el primer batallón de Zamora, se dirigió al Castell de Montjuïc. El gobernador del Castell no permitió que estos entraran al castillo y al hacerse de noche se dirigió a Gracia pasando después a la Ciutadella.  Ese día se embarcaron muchos súbditos franceses por intercesión del cónsul francés que les proporcionó los buques . Por órdenes de la junta se abrió la mesa de comunes depósitos extrayendo de él 26.819 reales de vellón.

Historia de Catalunya ("la Jamancia" [IV])

El diario El Imparcial debía editar un panfleto dictado por Joan Prim, sabiéndolo los centralistas los conmina a no hacerlo, y sus propietarios trataron de trasladar la imprenta fuera de la ciudad. Los cuatro carros donde estaban cargándolas fueron enviados a les Drassanes y las imprentas requisadas. El gobernador Juan Prim y Lorenzo Milans del Bosch salieron por la tarde hacia Gracia, instalándose con un batallón de voluntarios al vapor de Francisco Puigmartí, con una escaramuza con los sublevados. El día 4 se contaron tres muertos y seis heridos. Los miembros del Ayuntamiento solicitan al capitán general en la Ciutadella que cese los ataques a la ciudad, responde este que cuando cese el fuego proveniente de Barcelona hará él lo mismo con la fortaleza. Por causa de los proyectiles de artillería quema un almacén de cordelería que hay fuera de la muralla entre el Portal de Mar y la Ciutadella.
El día 5 se contaron dos muertos y doce heridos, diez de los cuales fueron conducidos al Hospital de la Santa Cruz de Barcelona. La noche del día 5 los sublevados una cincuentena de hombres armados hacen una salida hasta Sarrià para hacer prisioneros gente contraria a los centralistas, siendo rechazados por sus vecinos y dejando dos víctimas mortales: Ramon Valejo, tejedor de velos de Barcelona y José Margenat, farmacéutico de Sarrià. El Castell de Montjuïc estaba a cargo del gobernador Bernardo Echalecu que fue relevado por el coronel del Regimiento de América Fernando Sayas.Se habían instalado baterías en las Drassanes, al punto de la muralla de Hostallers (carrer Talleres), otra en Canaletas, y otra entre Junqueres y la Puerta Nueva. El día 7 el Castell de Montjuïc rompió su silencio, efectuando dos tiros de fogueo a las ocho de la mañana, deteniéndose a continuación el bombardeo procedente de la Ciutadella. De cuatro a siete de la tarde los cañones de Montjuïc inició un intenso bombardeo contra las Drassanes. Disparando 102 balas, 52 de las cuales fueron recogidas dentro del mismo fuerte. El capitán general dio la orden al gobernador de Montjuïc que suspendiera el bombardeo. Inicialmente, ante aquel bombardeo Francisco Torras y Riera gobernador de las Drassanes liga su corbata negra en la punta de un paño enarbolando esta enseña la resolución de luchar a muerte. Sin embargo poco después huyó de la ciudad.


Literatura Catalana (Guillem de Berguedà [II])

Durante siete años no se encuentran referencias del trovador, aunque podemos imaginar su vida de fugitivo, sin amigos que le ayudaran por miedo a las represalias que podían sufrir y quizás también debido, si realmente es verdad lo que indica la Vida del Cançoner, de la costumbre de Berguedà de no respetar esposas, hijas y hermanas; parece que sólo le hizo lado Arnau de Castellbó, con quien Berguedà mantuvo una relación constante y quien ayudó y defendió en varias ocasiones. Aún así, parece que el trovador podía haber reunido en esta época un pequeño grupo de hombres que actuaban fuera de la ley por el territorio catalán. También es de esta época la peregrinación que hizo a Santiago de Compostela.Durante la década de los 80 se vuelve a encontrar documentación sobre el trovador. Así en el testamento de su padre, en 1183, consta como heredero de los castillos de Madrona (conocido como Castell Barcelona), Casserres, Puig-reig, Espinalbet y Montmajor y lo hizo que tenía por Hugo de Mataplana. A través de algunos sirventesos del gran trovador provenzal Bertran de Born, que era buen amigo suyo, conocemos la enemistad que tuvo con el rey Alfons I, aunque en 1185 y siguientes parece que había hecho las paces con el monarca , ya que consta en varias ocasiones en su cortejo, como en la entrevista que el monarca celebró el 14 de abril de 1185 en el castillo de Najac de Roergue con el rey y también trovador Ricardo I Corazón de León, en ese momento duque de Aquitania y conde de Poitiers y más tarde rey de Inglaterra (1189), con el fin de reforzar su alianza contra el Conde de Toulouse.
Del 1187 se conserva el testamento original de Guillem de Berguedà, en que deja el castillo de Puig-reig y el lugar de Fenollet a la orden del Temple, mientras que el resto de posesiones, excepto algunos bienes menores que deberán ir a la orden del Hospital, pasarán a su hermano Berenguer, que deberá dar una cuarta parte a Bernat. Todo ello lo retendrán los frailes del Temple hasta que sean pagadas las deudas que el testador había contraído. Los testamento nos indica, como ya hemos insinuado, el poder feudal y económico del trovador: cinco castillos con caballeros y vasallos y las tierras correspondientes, varios lugares y masías en el Alt y Baix Berguedà, feudos en la Cerdanya, y derechos en Caldes y Sentmenat del Vallès. El documento también nos permite deducir que no se había casado y que no tuvo descendencia directa reconocida.
Una vez firmado el testamento desaparece de la niña real y lo volvemos a saber enemistad con el rey Alfons I, a quien escarnece en un sirventés. El 1190, Guillem de Berguedà ofendido con el rey y odiado por el arzobispo de Tarragona, anuncia en un sirventés dirigido a su amigo Arnau de Castellbó que se dirige a la corte de Alfonso VIII de Castilla, en ese momento aliado al rey de Navarra contra Alfonso de Aragón.
Los últimos años de la vida del trovador se caracterizan por su intervención en las luchas feudales en territorio catalán, principalmente en las que tuvieron el vizconde Arnau de Castellbó y Ponç de Cabrera contra el rey y el obispo y el conde de Urgell. En 1195, su amigo Bertran de Born, que como él había luchado y provocado muchas discordias, manifestó en un poema su arrepentimiento por la vida que había llevado y pedía a Berguedà que reflexionara sobre el pasado y siguiera su ejemplo. Poco caso de estos versos hizo el trovador, que continuó con sus disputas, aún más solo y más perseguido que en otros tiempos, pero al mismo tiempo más amenazador que nunca. Y tan violentamente como vivió murió, asesinado por un soldado que seguramente cumplía las órdenes de alguno de sus enemigos. La muerte ocurrió aproximadamente en 1196.

Literatura Catalana (Guillem de Berguedà [I])

Aproximadamente entre 1138 - 1196. Es el trovador catalan del que nos han llegado más textos. Aparte de la información que nos ofrece la vida de Guillem de Berguedà, que se encuentra en los "Cançoners", lo que podemos conocer sobre el trovador nos llega a través de documentos de la época y de sus propias composicionesEl vizcondado de Berguedà dependía del condado de Cerdanya y las primeras noticias que se tienen de los vizcondes son del siglo X. El año 1131 aparece documentado Guillem de Berguedà, padre del trovador, con motivo de rendir homenaje a Huguet de Mataplana, del que tenía un feudo; pero no es hasta 1138 que aparece la primera mención del trovador, cuando se ve su firma infantil junto a la de su padre en un documento oficial. Escritos posteriores indican que tenía tres hermanos más pequeños: Ramón, Berenguer y Bernat. Posiblemente la infancia y juventud de Guillem de Berguedà transcurrió como la de otros personajes de aquella época: un tiempo de formación tanto en el aspecto físico como cultural en una Catalunya que estaba todavía en proceso de formación, con estrecho contacto con los territorios occitanos, y en que las disputas internas que se iban alternando con las guerras con los sarracenos eran el marco de fondo.
Algunos sirventesos nos dan noticia de su encarcelamiento por varios delitos antes de 1175, pero fue esta fecha la que marca de forma clara su vida posterior. El 3 de marzo de este año mató a traición, es decir, de forma no honorable, Ramon Folc III de Cardona, personaje que debía odiar profundamente el trovador, que la había insultado y humillado en varios sirventesos, y contra el cual debía haber utilizado el gran poder que tenía en Catalunya y en la corte del rey Alfons I sin otros resultados que hacer aún más virulentos los ataques del trovador y llevarlo finalmente a la muerte. Las consecuencias del asesinato fueron inmediatas, Guillem de Berguedà tuvo que esconderse y huir, finalmente, de Catalunya y, además, fue despojado del título de vizconde que le correspondía como hijo mayor, aunque heredó las posesiones familiares, de las que nunca pudo disfrutar con tranquilidad.

Literatura Catalana (Cançó de Santa Fe [II])

La Cançó de Santa Fe ha sido objeto de debate sobre su lugar de composición y, en consecuencia, la lengua a la que debe ser asignada; por una parte, a causa de la lengua y el territorio descrito, el autor debía ser de la vertiente norte de los Pirineos y no demasiado lejos del mar Mediterráneo; esto reduce el ámbito geográfico probable en el Rosello y la Septimania, y así los distintos autores lo han asignada a Narbona o en Sant Miquel de Cuixà o Sant Martí del Canigó (Rosello), y otras, menos concluyentes, a algún otro sitio Occitania muy próximo a las tierras catalanas del norte.
Las distintas opciones territoriales están vinculadas a la opción de la lengua del poema ya la constatación de que en el siglo XI el catalán y el occitano eran lenguas muy próximas, más cuando el poema, aunque su origen culto, aunque no está sometido a la artificialidad de la lengua trovadoresca, muy alejada de la lengua hablada, lo que, de manera análoga a como sucedió con la renovatio carolingea, contribuirá a su distanciamiento en las próximas centurias. Si bien hay que mencionar que entre el catalán y el dialecto lenguadociano las diferencias son más acentuadas en la ortografía que en la expresión oral.
Pero los estudiosos han sido cautelosos a ser excesivamente tajantes, así: Antoine Thomas afirma, después de haber estudiado las características dialectales del poema, que hay que tomar en consideración el Narbonés, Languedoc, Provenza, Carcí y el Rosello
; decantándose finalmente por Narbona, con la condición, sin embargo, que lo hace con todas las reservas; Martín de Riquer dice que "no se puede afirmar la catalanidad de este hermoso e ingenuo poema de una manera indudable, por ahora"; Jeanroy lo sitúa en los confines del bajo Languedoc y la Cerdanya; E. Hoepfner afirma que el texto no es catalán, pero ciertamente fue elaborado en los confines inmediatos de su frontera lingüística que lo separa del lenguadociano; P. Alfaric, en la misma publicación que el anterior, afirma que fue redactado en Sant Miquel de Cuixà, opinión que comparte A. Roncaglia. En cuanto a la tradición del texto, éste había sido considerado, por los que la habían estudiado en Holanda, como catalán e incluso atribuido a Ausiàs March.
En favor de la opción catalana, predominan los argumentos sociológicos y geográficos: las reliquias de la santa se encuentran en Sant Miquel de Cuixà, el nombre de Fides era muy frecuente en el Rosello, los santos que se citan eran objeto de especial veneración en aquellas tierras, así como se corresponden las plantas, las flores, las frutas y el paisaje que se describe. El autor también hace muchas referencias a la Cerdanya, el Vall d'Aran, Aragón y Vasconia, suelos con que muestra una alta familiaridad, lo que no sucede con la descripción de la ciudad de Agen (entre Toulouse y Burdeos).
Por el contrario, la opción occitana se basa en el hecho de que gran parte de las formas lingüísticas y ortográficas adoptadas son las que acabarán prosperando definitivamente en el occitano.Lengua "limosina", o de Limós. Lluís Fornés, doctor en filología, Universidad de Valencia, en el libro La Valencia occitana, p. 66-69, Valencia, 1995, plantea la hipótesis de que la Cançó de Santa Fe podría haberse escrito a Llimós, a 25 km al sur de Carcasona, ciudad famosa por sus iglesias y conventos, lugar de una gran espiritualidad, de donde tomó nombre la lengua que más tarde produciría la civilización trovadoresca; aquella lengua se denominaba llimosina -la palatalización limosina y la idea de que puede venir de Limoges, lugar donde aparecen los primeros trovadores, aunque es la más conocida, probablemente no es la más exactamente. Es normal que el nombre de la lengua viniera de tradición religiosa cristina, más que trovadoresca, pagana. Por lo tanto, lengua limosina es aquella que actualmente se extiende entre Guéret, al norte de Limoges y Guardamar, al sur de Alicante, la cual se consideraba que había nacido con el primer documento en una lengua neolatina. La Canción de santa Fe, escrita a Limós, de donde tomó el nombre: lengua limosina, la lengua del primer documento, anterior a los trovadores. Los intereses políticos secesionistas han enturbiado la visión correcta del concepto. La lengua limosina es la que actualmente, y a partir del estructuralismo, se llama diasistema occitanoromà, en referencia a su sistema unitario que se sitúa entre el gal·loromà y el iberorromano.

Literatura Catalana (Cançó de Santa Fe [I])

Ss un poema hagiográfico (es la disciplina que estudia los santos, sus atributos y representaciones, sea desde un punto de vista teológico o no) medieval relativo a Santa Fe de Agen (fue una joven cristiana, muerta como mártir durante las persecuciones de los romanos. Es venerada como santa por varias confesiones cristianas), elaborado por un autor anónimo entre 1054 y 1076 y, por tanto, algunos años anterior a la lírica trovadoresca, lo que lo convierte en una de las más antiguas manifestaciones literarias en una lengua romance, aunque se discute si se debe asignar a la lengua occitana oa la catalana.El poema consta de 593 versos octosílabos, dividido en 49 series monorimes, y presenta la primera manifestación de la combinación de la poesía lírica y la danza en una lengua romance. La obra se conserva en un solo manuscrito en la Biblioteca Universitaria de Leiden (Holanda) y fue publicado por primera vez por José Leite de Vasconcelos, en 1902.
La Canción es una narración versificada del martirio de Santa Fe de Agen (s. III.), su suplicio y el castigo que recibieron sus verdugos: Diocleciano y Maximiano y, probablemente, se trata de una versión del texto latino "Passio sanctorum Fidias te Caprisii, citada en de mortibus persecutorum de Lactancio" (hoy perdida).
Elisabeth P. Work, divide la obra en dos partes distintas: la primera responde a una hagiografía convencional que ocupa las primeras 41 series, basada en las fuentes tradicionales y una original canción de felonía correspondiente a las ocho finales.  La primera parte elocuente y refinada y la segunda mediocre y pesada, a la manera del lai narrativo, mostrando la indignación por los hechos criminales que se describen. En todo caso, la lengua es coherente ortográficamente, léxicamente y rítmica en relación con el resto del poema.