miércoles, 21 de septiembre de 2016

Historia de Catalunya (El Compromís de Casp [V])

El 22 de abril de 1412 se inician las deliberaciones de los compromisarios, que disponen de un plazo temporal de dos meses para obtener un resultado.
Aunque la versión que contó Jerónimo Zurita en sus Anales de la Corona de Aragón (1562-1580, lib. XI, cap. 87) narraba que hubo una votación en la que seis compromisarios (los tres aragoneses: Domingo Ram, Francisco de Aranda, Berenguer de Bardají; dos valencianos: los hermanos Ferrer; y un catalán: Bernardo de Gualbes) respaldaron la candidatura de Ferran de Antequera, mientras que los otros dos compromisarios catalanes votaron por Jaime de Urgel y el tercer compromisario valenciano se abstuvo, no hay documentación coetánea que confirme que se dieron estas votaciones secretas; de hecho, no hay testimonios de la época que conozcan esta versión de los hechos, que solo comenzaría a difundirse muy posteriormente en los libros de historia. Así pues, si bien se ha repetido este relato hasta la actualidad, y aunque sin duda los jueces deliberarían y posiblemente tendrían diferencias, todos los acuerdos tomados en los procesos del Interregno entre la muerte de Martí I y la decisión final, incluida la Concordia de Alcañiz, se habían efectuado mediante consenso, sin señalar discrepancias y aprobando las propuestas por unanimidad. Este mismo tenor muestra el acta original notarial de proclamación de Ferran de Antequera como rey de Aragón por los compromisarios el 25 de junio de 1412 y el resto de actas, escritos y testimonios oficiales recogidos en los parlamentos de Aragón, Valencia y Catalunya. Todos coinciden en que los compromisarios dieron su conformidad unánimemente a la designación de Ferran. Lo confirma, asimismo, que el mensajero que llevó la noticia a la asamblea catalana de Tortosa, Melchor de Gualbes, contestó a las preguntas del obispo de Girona acerca del modo en que se había realizado la proclamación que fue por "las nueve personas en gran y feliz concordia", de igual modo se expresa el informe elaborado por los representantes del parlamento de Catalunya; además, a instancias de algunos de sus diputados, los tres miembros catalanes del Compromiso de Caspe declararon que "en todo momento habían sido libres y sin miedo de presiones" y que al final del proceso "todos eran de la misma opinión"
Ferran de Antequera de  fue proclamado rey el 28 de junio de 1412, como Ferran I "el Just" , quien el 5 de agosto entró en Zaragoza, donde juró su título ante las Cortes junto a su hijo Alfons

Historia de Catalunya (El Compromís de Casp [IV])

La elección de los nueve compromisarios fue encomendada por el Parlamento de Aragón a Gil Ruiz de Lihorí, gobernador de Aragón, y a Juan Jiménez Cerdán, Justicia Mayor del reino que designaron a:

Por Aragón:
- Domingo Ram, obispo de Huesca.
- Francisco de Aranda, antiguo consejero real y enviado de Benedicto XIII.
- Berenguer de Bardají, jurista y letrado general de las Cortes de Aragón.

Por Catalunya:
- Pedro de Sagarriga, arzobispo de Tarragona
- Bernardo de Gualbes, síndico y conseller de Barcelona.
- Guillem de Vallseca, letrado general de las Cortes catalanas.

Por Valencia:
- Bonifacio Ferrer, prior de la Cartuja de Portaceli; y posteriormente residente de la Cartuja de Vall de Cristo (Villa de Altura, Castellón).
- Vicente Ferrer, dominico valenciano.
- Ginés Rabassa, ciudadano de Valencia experto en derecho, que por enfermedad e incapacidad mental debida a su avanzada edad y estado de salud, fue sustituido por Pedro Beltrán.

Esta propuesta fue enviada a la Corte Condal, tras algunas vacilaciones por la composición de los compromisarios de Valencia (se debatió incluir a Arnaldo de Conques en lugar de Bonifacio Ferrer), ratificó la propuesta enviada por el parlamento de Alcañiz.

En el reino de Valencia, tras la victoria en la "Batalla de Murviedro (hoy Sagunto) de los Centelles" con el apoyo de las tropas de los partidarios de Ferran de Antequera sobre el gobernador Guillén de Bellera y los Vilaragut, partidarios de Jaume de Urgell, con el apoyo de la caballería del rey de Inglaterra dirigida por Ramón de Perelló y convocada por el propio Jaume II, se había disuelto el parlamento de Vinaroz y, a mediados de marzo, llegaron embajadores de Valencia (representada ya unitariamente por el parlamento de Morella) a Tortosa, donde Catalunya ratificaba la lista de compromisarios. Tras finalizar el acuerdo, representantes del parlamento catalán y Juan Subirats, delegado plenipotenciario del parlamento del reino de Aragón, recibieron a los delegados de Valencia y les propusieron sumarse a la elección definitiva. Con pleno consentimiento y sin dudarlo, los tres representantes del reino de Valencia ratificaron la lista de los nueve compromisarios y, finalmente, los tres Parlamentos, sin discrepancias, encomendaron a estos nueve elegidos la tarea de deliberar y proclamar al nuevo rey de Aragón

Historia de Catalunya (El Compromís de Casp [III])

Cada Estado debía reunir una asamblea, que en Valencia se vio utópica desde un primer momento, ya que las facciones del reino estaban divididas y cada una estableció un parlamento, que condujo a la batalla de Murviedro (27 de febrero de 1412), vencida por el partido que apoyaba a Ferran de Antequera. La representación del reino de Mallorca fue asumida por la asamblea catalana, aunque enviaron credenciales y, en las fases finales, emisarios tanto a la asamblea de Aragón como a la de Catalunya. En el reino de Aragón la asamblea se reunió en Alcañiz; en el reino de Valencia surgieron dos: la de Vinaroz y la de Traiguera; en Catalunya se encontraba en Tortosa.

El parlamento reunido en Alcañiz fue el que finalmente prevalecería al contar con el apoyo de la Iglesia y del papa Benedicto XIII, que decidió mediar en la crisis sucesoria promulgando, el 23 de enero de 1412, una bula en la que establecía que el estudio de los derechos al trono de los diferentes pretendientes al trono fuera realizado por compromisarios de los distintos reinos.
El 15 de febrero de 1412, Catalunya y Aragón firman la "Concordia de Alcañiz" en la que establecen que nueve compromisarios distribuidos en tres grupos ordenados en tres grados, con tres miembros en cada grado, que representarían los intereses de toda la Corona, reunidos en la localidad aragonesa de Caspe, deliberen sobre los derechos de los pretendientes y decidan quién de los candidatos debía ocupar el trono, siempre y cuando el elegido obtenga un mínimo de seis votos y al menos uno de cada grado. La "Concordia de Alcañiz" no prefiguraba que los grados correspondieran a los diferentes Estados de la Corona o a cualquier otra identificación, como por ejemplo con los estamentos o brazos que componían la sociedad del momento (nobleza, iglesia, ciudadanos). Sin embargo, en la práctica, aunque no se identificaron de ningún modo, acabaron agrupándose las ternas por comisarios de cada uno de los tres Estados peninsulares de la Corona. El reino de Valencia no había podido instituir un parlamento unificado, por lo que no llegó a tiempo para estar presente en las decisiones finales de la Concordia, a pesar de los esfuerzos aragoneses y catalanes para que pudieran unificar sus asambleas y enviar una representación unitaria a Alcañiz. Sin embargo, el mismo 15 de febrero llegaron enviados de la asamblea de Vinaroz con credenciales para poder confirmar los acuerdos tomados y al día siguiente, el 16 de febrero, los embajadores Pedro Puyol, Juan Gascó y Pedro Catalá aceptaron en su integridad todo lo acordado en la Concordia lamentando que no hubieran podido estar presentes representantes del parlamento de Traiguera, ahora reunido en Morella.

Literatura Catalana (Jaume Ballber i Casals)

Nacio en Terrassa, en 1867 - Barcelona, 1924. Fue un industrial que cursó la carrera de ingeniería mecánica en la Universidad Católica de Lovaina (Bélgica), donde se graduó en 1890.
Hijo del fabricante Ramon Ballber, fue premiado en el certamen literario organizado por el "Ateneu Terrassenc" (1890) y publicó artículos en el periódico "El Tarrasense". Ejerció, también, las funciones de corresponsal en Barcelona de la revista "Egara". Relacionado con los núcleos que controlaban el poder político en Terrassa, tomó parte en la recepción ofrecida al primer ministro español Práxedes Mateo Sagasta cuando visitó la ciudad en 1890.
Colaboró con el movimiento catalanista y fue uno de los fundadores de la "Agrupación Regionalista de Terrassa" (ocupó el cargo de secretario de la primera junta en 1891). Dentro de este contexto, presentó enmiendas al "Proyecto de bases para la constitución regional catalana" (1891) y fue designado delegado a la Asamblea de Manresa 

Literatura Catalana (Pere Aldavert i Martorell)

Nacio en Barcelona 1850 - 1932. Fue un periodista, escritor y político catalan. Fue uno de los más entusiastas impulsores de los inicios del movimiento catalanista, del que fue un personaje clave. Amigo y colaborador de Àngel Guimerà, con sólo 20 años participó en la creación de la "Jove Catalunya" (1870), y colaboró en el semanario "La Gramalla" órgano oficial de esta entidad. En 1871 inició la publicación de la revista "La Renaixença" (diario desde el 1881) y que mantuvo hasta el 1905 en buena parte gracias a su tenacidad y a sus artículos escritos en un lenguaje llano y muy vivo.

Colaboró destacadamente con la "Lliga de Catalunya", y con la "Unió Catalanista", en la primera asamblea de la cual (1892) en la que intervino en la discusión y la aprobación de las "Bases de Manresa". Sus seguidores promovieron la creación de la "Asociación Popular Regionalista", donde defendieron la intransigencia de sus planteamientos. Su influencia declinó con la llegada de las nuevas generaciones nacionalistas, ya que se mantuvo siempre fiel a sus planteamientos originarios.

Literatura Catalana (Santiago Rusiñol i Prats)

Nacio en Barcelona, 25 de febrero 1861 - Aranjuez (Madrid), fue un pintor, escritor y dramaturgo catalan. Nació en el seno de una familia de industriales del textil, procedentes de Manlleu. Se formó en el Centro de acuarelistas de Barcelona y fue discípulo de Tomás Moragas. Viajó a París en 1889, donde vivió en Montmartre junto con Ramón Casas y con Ignacio Zuloaga.
Se familiarizó con el simbolismo y la pintura al aire libre. Tras regresar a España funda en Sitges el taller-museo del "Cau Ferrat", y frecuenta en Barcelona las tertulias del café "Els Quatre Gats". Su posición social y económica acomodada le permitió hacer frecuentes viajes. En 1901 fue a Mallorca con Joaquín Mir.
El año 1908 recibió la medalla de la Exposición Nacional de Bellas Artes. Su pintura está muy influida por los impresionistas y tiene temática paisajista, tanto rural como urbana, retratos y composiciones simbólicas de inspiración modernista. Al comienzo de su carrera incluía figuras humanas. En las etapas finales sólo pintaba paisajes, especialmente de los Reales Sitios como Aranjuez o La Granja. Entre sus obras más destacadas figuran "La morfina" y "La medalla", ambas de 1894.

En su obra literaria, siempre en catalán, se incluyen poemas en prosa ("Oracions", 1897), dramas como "L'alegria que passa" (1898), "Cigals i formigues" (1901), "La bona gent" (1906) y novelas costumbristas como "L'auca del senyor Esteve" (1907), que fue adaptada al teatro por el propio Rusiñol en 1917, "La niña Gorda" (1914), "El català de La Mancha" (1917) o "En Josepet de Sant Celoni".000
También escribió para periódicos como "La Vanguardia" o revistas como "L'Esquella de la Torratxa". Fue un personaje importante de la "Renaixença" literaria y cultural de Catalunya, y del mundo intelectual y bohemio de la Barcelona de su tiempo. Estuvo en Buenos Aires, en Rosario y en Córdoba para el centena