lunes, 26 de febrero de 2018

Aquelarres en Sant Ramon de Call

Aunque los aquelarres o reuniones de brujas eran más habituales en el campo, también se celebraron algunos en Barcelona, sobre durante la Edad Media. En la plaza de Manuel Ribé, antes conocida como Sant Ramon del Call, tuvieron lugar algunos de ellos la noche de los sábados. Entre los extraños rituales que se practicaban, destacaba un baile en círculos donde participaba el mismísimo demonio en forma de jorobado. Muchas leyendas dicen que la sardana, proviene precisamente de esos aquellarres

El misterio del Obispo de Barcelona (Manuel Irurita Almandoz)

Nacio en Larraintzar, en Ultzama (Navarra), 1876 - Montcada i Reixac (Barcelona) el 3 de diciembre de ​​1936. Fue un eclesiástico navarro, doctor en filosofía y en teología y catedrático de lenguas clásicas en la Universidad de Valencia, que fue nombrado obispo de Lleida en 1927 y posteriormente obispo de Barcelona en 1930. Personas del entorno del presidente Francesc Macià lo consideraron como gran enemigo de Catalunya
En 1898 fundó el Orfeón Pamplonés. Profesó durante un tiempo en el orden capuchino en Lecároz, abandonándolo más tarde para ejercer como maestro. En 1899 fue ordenado sacerdote después de obtener el beneficio como cantor de la catedral de Valencia.
Durante la Segunda República, una campaña exigió su expulsión de Catalunya, aún así, promovió la fundación de nuevas parroquias suburbiales y de obras de asistencia social, impulsó la Obra de Ejercicios Parroquiales y la Federación de Jóvenes Cristianos de Catalunya . En 1931 consagró la iglesia de San José Oriol. Cuando murió el presidente de la Generalitat Francesc Macià, el 25 de diciembre de 1933, Irurita se negó en un primer momento a enviar sacerdotes a la vela y fue el arzobispo Francisco Vidal y Barraquer quien le obligó a cambiar de posición.
En septiembre de 1936, coincidiendo con la entrada de los anarquistas en el gobierno de la Generalitat, la sede episcopal fue asaltada, y Irurita tuvo que huir.  Después de esconderse durante cuatro meses en casa de un amigo orfebre, Antoni Tort, el obispo fue detenido en un registro, el 1 de diciembre, y trasladado y encerrado en el monasterio de Sant Elías, utilizado entonces como checa o prisión. Se cree que fue fusilado en el cementerio de Montcada i Reixac por su condición de sacerdote, el 3 de diciembre de 1936, pero es un episodio controvertido, ya que algunos testigos afirman haberlo visto vivo en 1939. Sus supuestas despojos están enterrados en la Catedral de Barcelona, ​​en la capilla del Santo Cristo de Lepanto. La identificación de su dentadura, hecha por el odontólogo forense Juan Carol Montfort, ha permitido comprobar su equivalencia con la declaración de dos dentistas que la habían tratado cuando era obispo de Lleida.
De todos modos es evidente que la misma Iglesia católica duda de la veracidad de su martirio, por cuanto a diferencia de todos los demás obispos, sacerdotes y seglares que fueron asesinados durante la Guerra Civil, Irurita no ha sido beatificado; sólo ha sido proclamado sirviente de Dios, al incoarse la causa de investigación para su beatificación.