Presidents de la Generalitat (Francesc de Sentjust i de Castre)

Francesc de Sentjust i de Castre, nacio en Barcelona a finales del s. XVI - Muere en la Bisbal d'Empordà (Girona). Fue abad de Arles (1598-1616) y arcediano de Benasque (Huesca). Fue nombrado President de la Generalitat de Catalunya el 22 de julio de 1611.Era hijo de Enric de Sentjust i de Sagarriga y de Jerònima de Castre. Los Sentjust era una estirpe implicados en la participación institucional desde hacía siglos. Ya en 1399, Berenguer de Sentjust había participado en la coronación de Martí I, y tanto su padre como su abuelo habían asistido a corts a finales del siglo XVI. Había ingresado a la carrera eclesiástica en la orden de Sant Benet. Fue monje en Sant Cugat del Vallés, pavorde en el Penedès y síndico en Roma. Fue abad en el monasterio de Santa María de Arles (1598-1616) y posteriormente en Santa Maria de Ripoll (1616-1621), donde construyó el porche que da acceso al claustro. Fue nombrado obispo de Elna (1621-1622) y de Girona (1622-1627). Como responsable eclesiástico participó en las Corts de Barcelona de 1599 y de 1626 Durante su trienio al frente de la Generalitat menudearon los conflictos con los oficiales reales y con la inquisición que había decidido encarcelar a un oficial del "veguer" (La veguería es una demarcación territorial histórica de Catalunya de origen medieval, que existió desde el siglo XII hasta el XVIII, cuando las veguerías fueron sustituidas por corregimientos a raíz del Decreto de Nueva Planta promulgado por el rey Felipe V tras la Guerra de Sucesión Española. Se trataba del territorio sobre el cual tenía potestad un "veguer", figura equivalente a la de un Correguido en Castilla). La Generalitat y el Consell de Cent denuncian el caso ante la Real Audiencia que invitó a los inquisidores a abandonar el principado. La corona ordena el sobreseimiento de esta decisión judicial. El 14 de abril de 1612, la Corona promulga una pragmática prohibiendo los pedreñales, armas de fuego cortas que usaba el estamento militar. El desprecio de la corona y especialmente del virrey Francisco Hurtado de Mendoza y Cárdenas hacia las instituciones y leyes de Catalunya fue una constante en este periodo.