Mientras duraba el éxito de "Antaviana", en noviembre de 1978 se publicó "Invasió sutil" y otros cuentos en la colección "Antología Catalana" de Ediciones 62. El libro tuvo mucho éxito y, en el año 1979, recibió el Premi Lletra d'Or y el Premi Crítica Serra d'Or de narrativa. Ediciones 62 decidió reeditar algunos de los libros escritos por Calders. Entre estas reediciones destaca la del cuento "Raspall", incluido en "Cróniques de la veritat oculta". La reedición de este cuento infantil se hizo con ilustraciones de Carme Solé y ganó Premi Serra d'Or al mejor libro infantil ilustrado de 1982. Durante ese tiempo se traduce la obra de Calders en otros idiomas como el castellano, holandés, alemán, gallego, euskera e incluso japonés, entre otros.
En el año 1982, con la institución de la Creu de Sant Jordi por el gobierno de Jordi Pujol, se premia Pere Calders: "por haber enriquecido la literatura catalana con una obra de muy alta calidad la cual, con la combinación de la fantasía y la humor, a menudo satírico, logra un extraordinario tono lírico ". En 1983 publicó "Tot s'aprofita", una recopilación formado por 24 cuentos largos, 10 de breves y una narración en México. El libro recibió uno de los III Premis Literaris de la Generalitat de Catalunya y también un Premio crítica Serra d'Or. En 1984 la Editorial Laia publicó un nuevo libro de cuentos titulado "De teves a meves: trenta-dos contes que acaben més o menys bé". También se publicó ese mismo año por Ediciones 62 "Tria personal", un libro formado por 28 cuentos de Calders. En 1985 se reestrenó "Antaviana" en el Teatro Condal y la vieron unas 90.000 personas. En 1986 recibió el Premi d'Honor de las Lletres Catalanes. Después de recibir este premio, el PEN catalán presentó 3 candidatos al Premio Nobel de Literatura: Baltasar Porcel, Miquel Àngel Riera y Pere Calders. En 1986 se publicó la novela "Gaeli i l'home de déu", la obra que había escrito en medio de la Guerra Civil, y ganó el Premi Crexells del Ateneu Barcelonès. En 1987 publicó "El barret fort i altres inèdits", también por Editorial 62. En 1990 inició una serie de colaboraciones con la revista "El Temps", donde siguió publicando hasta poco antes de su muerte. En 1991, con recoge y comentarios de Lluís Solà y Dachs, salió el libro "Dibuixos de guerra". Calders y Tísner, con las ilustraciones publicadas en "L'Esquella de la Torratxa". Ese mismo año, Calders empezó a encontrarse mal y los médicos le diagnosticaron un cáncer de próstata, aunque la familia le dijo que se trataba de una osteopatía
En el año 1982, con la institución de la Creu de Sant Jordi por el gobierno de Jordi Pujol, se premia Pere Calders: "por haber enriquecido la literatura catalana con una obra de muy alta calidad la cual, con la combinación de la fantasía y la humor, a menudo satírico, logra un extraordinario tono lírico ". En 1983 publicó "Tot s'aprofita", una recopilación formado por 24 cuentos largos, 10 de breves y una narración en México. El libro recibió uno de los III Premis Literaris de la Generalitat de Catalunya y también un Premio crítica Serra d'Or. En 1984 la Editorial Laia publicó un nuevo libro de cuentos titulado "De teves a meves: trenta-dos contes que acaben més o menys bé". También se publicó ese mismo año por Ediciones 62 "Tria personal", un libro formado por 28 cuentos de Calders. En 1985 se reestrenó "Antaviana" en el Teatro Condal y la vieron unas 90.000 personas. En 1986 recibió el Premi d'Honor de las Lletres Catalanes. Después de recibir este premio, el PEN catalán presentó 3 candidatos al Premio Nobel de Literatura: Baltasar Porcel, Miquel Àngel Riera y Pere Calders. En 1986 se publicó la novela "Gaeli i l'home de déu", la obra que había escrito en medio de la Guerra Civil, y ganó el Premi Crexells del Ateneu Barcelonès. En 1987 publicó "El barret fort i altres inèdits", también por Editorial 62. En 1990 inició una serie de colaboraciones con la revista "El Temps", donde siguió publicando hasta poco antes de su muerte. En 1991, con recoge y comentarios de Lluís Solà y Dachs, salió el libro "Dibuixos de guerra". Calders y Tísner, con las ilustraciones publicadas en "L'Esquella de la Torratxa". Ese mismo año, Calders empezó a encontrarse mal y los médicos le diagnosticaron un cáncer de próstata, aunque la familia le dijo que se trataba de una osteopatía
No hay comentarios:
Publicar un comentario