miércoles, 26 de agosto de 2015

Religiones y Cultos (Cap. Grecia [XLI])

El Olimpo (I) [el hogar de los Dioses Griegos]

Para la mitología griega el Olimpo era el hogar de los dioses olímpicos, los principales dioses del panteón griego, presididos por Zeus. Como ocurre con otros aspectos y elementos de la mitología, el número e identidad de los dioses que habitaban ese Olimpo (el llamado «Concilio de los Dioses») es impreciso de acuerdo con lo tradición. Originalmente, parece que su número era de 12 aunque algunos historiadores de la Grecia Clásica llegan a citar hasta 14.
Olimpo significa lo más alto entre lo más alto, al igual que los dioses olímpicos eran los mejores entre los dioses griegos.

Para que estos Dioses llegaran a ocupar el Olimpo, debieron luchar durante 10 años en los que se llama "Batallas de los Titanes" o la "Guerra Titánica" que enfrentó a entre las dos razas de deidades muy anteriores a la existencia de la humanidad: los Titanes, luchando desde el monte Otris, y los Olímpicos, que llegarían a reinar en el monte Olimpo
El marco para esta importante batalla fue creado después de que el titán más joven, Crono, derrocó a su propio padre, Urano (dios del Cielo y gobernante del universo), con la ayuda de su madre, Gea (la Tierra). Crono castró entonces a su padre, se apoderó de su trono y liberó a sus hermanos titanes, que habían sido encerrados en el Tártaro bajo el reinado tiránico y egoísta de Urano.
Urano profetizó que los propios hijos de Crono se rebelarían contra su gobierno de la misma forma que él y sus hermanos habían hecho. Por miedo de que sus futuros hijos se rebelasen contra él, Crono se convirtió en el terrible rey que su padre Urano había sido, tragando enteros a sus hijos a medida que nacían de su esposa (y hermana) Rea.
Ésta logró esconder a su quinto y sexto hijos, Poseidón y Zeus, diciéndole que había dado a luz un caballo y le dio un potro para que se lo comiera en lugar de Poseidón, y en lugar de Zeus le entregó una piedra envuelta en pañales.2

Rea llevó a Zeus a una cueva en la isla de Creta, donde éste fue criado por los Curetes y las ninfas Adrastea e Ida. Cuando Zeus se hizo mayor, Metis dio a Crono una poción especial, que provocó que éste vomitara a los hijos que se había tragado. Zeus los llevó entonces a la rebelión contra los Titanes.
Entonces los Olímpicos, guiados por Zeus, declararon la guerra a la anterior generación de deidades, los Titanes. Éstos fueron encabezados por Crono e incluían a Ceo, Crío, Hiperión, Jápeto, Atlas y Menecio. Los Olímpicos eran guiados por Zeus e incluían a Hestia, Hera, Deméter, Hades y Poseidón. Probablemente Estigia y sus hijos también lucharon en el bando de los Olímpicos

Los Hecatónquiros y los Cíclopes, que habían sido encarcelados por Crono, ayudaron a los Olímpicos. Se decía que los Hecatónquiros ayudaron a los Olímpicos arrojando enormes piedras a los Titanes, de cien en cien. Los Cíclopes ayudaron fabricando las famosas armas de Zeus, los rayos.

Habiendo logrado por fin la victoria tras toda una década de guerra, los Olímpicos dividieron el botín entre ellos, otorgando el dominio del cielo a Zeus, el del mar a Poseidón, y el del inframundo a Hades. Procedieron entonces a encerrar a los derrotados Titanes en el Tártaro, las más hondas profundidades del inframundo. Sin embargo, dado que durante la guerra Océano y las Titánides Tea, Rea, Temis, Mnemósine, Febe y Tetis, habían permanecido neutrales, no fueron castigadas por Zeus. Algunos otros titanes que no fueron encerrados en el Tártaro fueron Atlas, Crono, Epimeteo, Menecio y Prometeo. Zeus dio a Atlas un castigo diferente: Urano, el cielo, casi se había derrumbado sobre la tierra tras la guerra debido a la enorme lucha que había ocurrido bajo él, por lo que Zeus dispuso que Atlas sujetase los cielos por toda la eternidad. Epimeteo, Menecio y Prometeo cambiaron de bando y ayudaron a Zeus en la guerra, por lo que no fueron castigados

No hay comentarios:

Publicar un comentario