lunes, 7 de septiembre de 2015

Leyendas en Catalunya (Marmellar, "La Leyenda Negra" [II])

Desde entonces, la Pobla de Marmellar se ha convertido en un tema clásico entre los aficionados a las ciencias ocultas. Hay grupos de temerarios que hacen excursiones hasta el pueblo maldito y después cuentan sus sensaciones en la red. Los hay que acuden a realizar psicofonías y sesiones de ouija. Otros sólo buscan un sitio apartado para hacer un botellón. Sea como sea, la especial fascinación que despiertan las viviendas deshabitadas se alía aquí con dos crímenes reales, confiriendo una atmósfera de misterio a estas ruinas.
A pesar de todo Marmellar un lugar con sus misterios dos casos sin resolver, y cantidad de personas que aseguran que en ese lugar ocurren fenómenos extraños. Con extrañas luces entre las ventanas derruidas de las casas y abandonadas que acompañaban a una serie de personas encapuchadas, que espantaban a los merodeadores, muy parecidas a los del Ku Klux Klan (KKK), y que no son otra cosa que las sectas satánicas arraigadas por toda la parte levantina y mediterránea en general... también se han visto extrañas siluetas recortadas contra la luna llena que sobrecoge a todo aquél que las presencia

La Pobla de Marmellar 

Catalunya Misteriosa (Marmellar, "La Leyenda Negra" [I])

Marmellar, es un pueblo abandonado de Tarragona perteneciente a la comarca Baix Penedès (Tarragona), y dentro del municipio de Montmell. Su nombre se debe a un riachuelo que trascurre por las cercanías. Los primeros datos que se tienen sobre este lugar datan del año 1023 y hacen referencia a su castillo e iglesia interior. Se cree que el uso de esta fortaleza estuvo relacionado con la iglesia y así continuó durante varios siglos, siendo la comunidad de Sant Ruf la que establecería allí un convento. La iglesia de Santa María de Marmellar data del año 1149, cuando a las faldas del castillo comenzó a crecer el pequeño pueblo.

La leyenda Negra de Marmellar

A diferencia de la mayoria de los demas pueblos con psicofonias, la fama de este pueblo como maldito no viene de épocas remotas.
En el pueblo se han cometido dos crimenes. El primero supuestamente relacionado con el satanismo o algún sucedáneo de estas prácticas, aunque este habiendo sucedido en la realidad, pero variando los detalles en función de la memoria local, unos apuntan que una joven tras una fiesta heavy, en la verbena de Sant Joan de 1993, en un local de la localidad cercana de Calafell y tras hablarse de la leyenda misteriosa de Marmellar deciden ir hasta este pueblo, otros vecinos apuntan a que fue llevada en contra de su voluntad, una vez allí serviría en un ritual de magia negra, violada en una de las casas cercanas a la iglesia sobre un viejo colchón que más tarde quemarían con toda seguridad para borrar cualquier rastro, para más tarde quemar a la joven o ya llevarla calcinada y depositarla en el interior de uno de los nichos del cementerio, dejando rastros evidentes de su advocación satánica o tal vez para que así lo pareciera, este crimen nunca se esclareció, nunca se encontraron los culpables

El segundo crimen ocurrido el 14 de febrero de 1996, día de los enamorados, Ana M.B. trabajaba en una gasolinera que se ubica entre Banyeres y L´Arboç, cuando unos atracadores tras llevarse la recaudación la raptaron para asesinarla cerca de este pueblo, en la urbanización cercana al pueblo

fuente: http://franrecio.com

Misterios en la Peninsula Iberica (El Palacio de Linares [III])

Pero ahi muchas cosas detras del Palacio de Linares y cosas que son dificil de encontrar una naturalidad a los hechos...

La versión de lo que ocurrió en el Palacio la dió a conocer un anciano que residía en Valladolid, de nombre Isabelino Sánchez Rosales, que aseguraba ser el hijo de María Rosales y de un cartero de la provincia castellana que se quedó huérfano a una temprana edad. Cuando doña Raimunda Osorio, Marquesa de Linares, fallece, se comienza a realizar el oportuno inventario de los bienes del palacio, pero antes de que finalice muere el Marqués y a su muerte se abre un nuevo testamento ológrafo, realizado el 31 de diciembre de 1901.

En este último testamento el marqués José de Murga nombra como albaceas, entre otras personas, a su ahijada Raimunda Avecilla y Aguado, de quien sólo se sabe que era una mujer soltera y sin profesión, sin una clara vinculación a los Marqueses y cuyo nombramiento testamentario vierte más dudas y misterio aún en torno a la saga de los Linares.

Sobre los descendientes de Raimunda Avecilla y Aguado recae la confirmación de una muerte violenta. Esta mujer, se casó con Felipe Padierna de Villapadierna y Erice y de este matrimonio nacieron José María y María del Carmen que fue asesinada en el interior del palacio de Linares durante la Guerra Civil. Todo ello hace pensar que la inmensa fortuna del primer marqués de Linares no fue a parar a obras benéficas (como en un principio parece que iba a ser destinada), ni siquiera a la niña marcada que un hombre de Valladolid asegura que existió y de la que afirmaba ser su hijo, sino a una extraña mujer que curiosamente llevaba por nombre el de la propia esposa del marqués de Linares, Raimunda.

Pero la leyenda existe incluso anterior a la muerte de los Marqueses de Linares, los madrileños de principios de siglo creían ya entonces en el fantasma del palacio. Cuentan que habitaba en la capilla, una lujosa habitación decorada con mosaicos y vidrieras con imágenes de los apóstoles que se encontraba en la planta noble del edificio...

Tambien se habla de un maleficio que parece recaer sobre todos y cada uno de los inquilinos de la noble residencia... Incluso el industrial soriano Emiliano Revilla es uno de los más exponentes más claro, su secuestro se produjo al poco tiempo de haber adquirido el mueble.

Solo es casualidad? O en verdad tiene una "maldición"

Misterios en la Peninsula Iberica (El Palacio de Linares [II])

La noticia salto en mayo de 1990, TvE daba a conocer unas estremecedoras psicofonías captadas en el Palacio de Linares de Madrid por una desconocida doctora llamada Carmen Sánchez de Castro. En ellas podía apreciarse nítidamente la voz quejumbrosa de una niña que decía: “Mamá, mamáYo no tengo mamá”. Una mujer se lamentaba: “Mi hija Raimunda Nunca oí decir mamá”. Otra psicofonía recogía una voz masculina que exclamaba: “¡Fuerano, aquí no!”. Desde entonces, el Palacio de Linares se convirtió en el blanco de especulaciones sobre una supuesta tragedia familiar ocurrida en el seno de la familia Linares. El hecho de que la Policía desenmascarara a la supuesta doctora y psicóloga, una delincuente sobre la que pendía una orden de búsqueda y captura desde hacía diez años, no frenó la avalancha de parapsicólogos, investigadores y curiosos que invadieron el edificio en busca de la respuesta al misterio. ¿Fueron los marqueses de Linares hermanos? ¿Asesinaron y emparedaron a su propia hija en el palacio familiar?



Incluso los trabajadores de seguridad que trabajan en el Palacio de Linares, han contado que se escuchan esas voces y que nadie saben de donde provienen.
Según ellos objetos que se mueven, presencias, golpes, cambios de temperatura bruscos... segun afirman son "energias" residuales de un lugar antiguo y que fue habitado por multitud de personas.




El Palacio de Linares 

Misterios en la Peninsula Iberica (El Palacio de Linares [I])

El Palacio de Linares, era conocido en sus primeros años como el Palacio de Murga, se encuentra en Madrid, situado entre el Paseo de Recoletos y la c/ de Alcala, su fachada principal está en la Plaza de Cibeles, antiguamente en los terrenos de los antiguos Molinos de Plata y el Pósito Real de Madrid, que era gran almacén de cereal, pensado para atender posibles crisis de abastecimiento en la ciudad. El Palacio de Linares es muy conocido debido a las leyendas fantasmales que le rodean.


La Leyenda

José de Murga y Reolid y Raimunda de Osorio y Ortega, eran los I Marqueses de Linares y I Vizcondes de Llanteno, compraron el solar, de 3.064 metros cuadrados, en 1872, al Ayuntamiento de Madrid. Se encomendaron las obras al arquitecto municipal Carlos Colubí en 1877, siguiendo fundamentalmente los diseños del arquitecto francés Adolf Ombrecht, responsable asimismo de la construcción de otros fastuosos palacios como el desaparecido Palacio de Portugalete, propiedad de los Duques de Bailén. Algunas partes del palacio de Linares, como la escalera de mármol que da paso al jardín, las caballerizas o la famosa Casa de Muñecas, fueron obra de Manuel Aníbal Álvarez. Los marqueses de Linares se mudaron al edificio en 1884, aunque las obras no terminarían por completo hasta 1990.
Una turbia leyenda persigue a José y Raimunda, y al palacio que levantaron en Madrid. Según la rumorología madrileña, el palacio de Linares encerraría los fantasmas de los primeros marqueses de Linares, así como el de una niña, su supuesta hija. Siguiendo esta leyenda, José de Murga y Reolid le habría confesado a su padre, el rico comercial Mateo Murga y Michelena, haberse enamorado de una muchacha humilde, Raimunda Osorio, supuestamente hija de una cigarrera de Lavapiés. Al conocer su padre el nombre de la joven, horrorizado, habría mandado a su hijo a estudiar a Londres, con el fin de hacerle olvidar tal amor de juventud. La razón de su espanto vendría dada por el hecho de que esa muchacha humilde habría sido fruto del amor extramatrimonial del propio Mateo con la madre de ésta, y por tanto, ambos enamorados serían hermanos de padre. La leyenda continúa situando a Mateo recientemente muerto y a los jovenes recién casados. En tal situación habría encontrado José una carta de su padre dirigida a él en la que le explicaba las razones de su oposición a tal relación. José y Raimunda, conscientes del pecado incestuoso que habrían cometido, se habrían dirigido al Papa Pio IX , quien finalmente les habría otorgado una bula papal denominada Casti convivere, esto es, vivir juntos pero en castidad. Sin embargo, el amor que se profesaban les habría hecho pasar por alto su relación de medio hermanos y habrían engendrado una hija, a la que habrían asesinado siendo niña para evitar un gran escándalo. Tal hija, Raimundita, habría sido emparedada o ahogada, y enterrada en el propio palacio y, según tal leyenda, hoy en día, seguiría su espíritu paseandose por los grandes salones del viejo palacio cantando canciones infantiles y llamando a sus padres. A pesar de que durante años no se han podido encontrar pruebas históricas que demuestren que los marqueses eran hermanos de padre y que tuvieran ninguna clase de descendencia.

Leyendas en Catalunya (La Senyera [IV])

Las Leyendas Aragonesas

- La Boda Real entre Petronila de Aragón y el Conde Ramón Berenger IV

Según es versión, Alfonso II heredó el apellido de su madre Petronila, y no el de su padre (sic), al haberse aplicado la figura jurídica del derecho altoaragonés de la boda en casa en la donación del reino de Ramiro a Ramón Berenguer IV. Por lo tanto, el emblema sería del linaje aragonés. Esta hipótesis, que no tiene el aval de ningún jurista, fue refutada en 1997 por el doctor en derecho José Serrano Daura, ya que no existe ningún rastro documental de esta institución en el siglo XII, su existencia sería incompatible con las diferentes compilaciones de los fueros de Jaca hasta finales del siglo XIV y con los fueros de Aragón del 1247. Además, los juristas aragoneses que más han estudiado la institución sólo la remontan al siglo XVIII.  La institución es altoaragonesa, es decir, desconocida ya en Huesca y Barbastro, y sólo consiste en el disfrute, por parte del foráneo de la casa, del usufructo vidual sobre los bienes del cónyuge muerto y no en su titularidad (el reino) que sí obtuvo el conde de Barcelona que recibió el juramento de fidelidad público de todos los nobles aragoneses propio de la estructura feudal y que los conllevaba la obligación de seguirlo y servirlo como su señor. Según Joaquín Costa, la boda en casa consiste en la facultad que se reserva en los capítulos matrimoniales el cónyuge extranjero, en caso de enviudar, de contraer nuevo matrimonio sobre la casa, y los bienes de ella, sin perder el usufructo foral que queda prorrogado en perjuicio de los herederos legítimos. Por otra parte, si Alfonso hubiera heredado el apellido de su madre este hubiera sido el de la casa de Pamplona o Ximena propio de los reyes de Aragón anteriores a la llegada de la casa catalana.
Sorprendentemente este retablo, ambos conyugues tienen su estandarte o solo se pinto el de la esposa?
 
- Los colores Papales, cedidos a la Corona de Aragón

El rey de Aragón y Pamplona, ​​Sancho Ramírez y su reino juraron fidelidad a la Santa Sede el 1089 y habría adoptado los colores de su nuevo señor feudal que serían amarillo y rojo. Que estos eran los colores "lo demostrarían" dos frescos del 1247 donde se ve al Papa con un sello que llevaba la sombrilla papal con estos colores. Pero los frescos son de la capilla de San Silvestre reconstruida al XIII, es decir, son posteriores a la visita a Roma que hizo el rey Pedro el Católico, acompañado por nobles catalanes y provenzales para hacerse coronar por el Papa el 1204. En esta visita, el rey ofreció al papa su emblema y este aceptó llevarlo él y sus sucesores. No había armas ni pendón con armas de la Iglesia católica anteriores al siglo XIII y cuando las tuvieron no fueron paladas sino dos llaves en aspa. Los colores de la iglesia en la edad media eran el amarillo y el rojo y si fuera cierta esta hipótesis Navarra también tendría las barras en su escudo al ser un emblema del linaje. La actual bandera de Roma, amarilla y roja, fue adoptada en 1860.En cuanto a los colores de los cordones, las referencias, son de una cincuentena de documentos papales que se conservan con bolas, de los siglos XI y XII, indican que los cordeles que sujetaban eran de colores verde, azul, blanco, amarillo o rojo mezclados entre ellos. Documentos que combinaran el amarillo y el rojo sólo hay ocho





 

Leyendas en Catalunya (La Senyera [III])

Las Leyendas Catalanas

- Leyenda de Otger Cataló

 En su obra Crónica de Aragón (1499), el historiador aragonés Gualberto Fabricio de Vagad explicaba que el primer rey de Aragón que tomó la Señal Real de Aragón fue Alfonso II, hijo del conde de Barcelona Ramón Berenguer IV, dejando claro que eran "los bastones o palos de 'Catalueña'". Del mismo modo se expresó el también historiador Lucio Marineo Sículo en la obra de Aragoniae Regibus (1509), donde añadió la novedad que el emblema tenía su origen en el mítico caballero Otger Cataló. La obra de Lucio Marineo Sículo fue traducida al castellano por Juan de Molina e impresa en Valencia con el nombre de Crónica de Aragón. Partiendo de esta traducción del historiador castellano Gonzalo Fernández de Oviedo inventó una versión primigenia de la leyenda de las cuatro barras en su obra autógrafa Catálogo Real de Castilla.  El historiador español explica que el caballero Otger Cataló tenía por armas un escudo franco todo dorado, y que mientras luchaba contra los sarracenos fue herido en una mano. Cuando quiso dirigir el escudo, le quedaron cinco marcas de los dedos manchados de sangre en el escudo. Terminada la batalla, Otger Cataló mandó que a partir de entonces ese fuera el escudo de sus sucesores.

- Leyenda de Wilfred "El Pilos" 

En la Segunda parte de la crónica general de España de Beuter, llega el momento de explicar los hechos del conde de Barcelona Wifredo el Velloso, Beuter inserta el episodio de la Leyenda de las cuatro barras de sangre. Cuenta Beuter que los normandos atacaron Francia y el conde Wifredo el Velloso fue a ayudar al emperador franco. Una vez derrotados los normandos, el conde Wifredo el Velloso pidió al emperador Luis -no se concreta de qué Luis se trataba, si de Luis I (814 a 840), de Luis II (877-879), o de Luis III (879 hasta 882), que le diera un escudo de armas. Entonces, el emperador se le acercó, se mojó los dedos de la mano derecha en una herida que tenía el conde y los pasó de arriba a abajo del escudo dorado del conde, diciéndole: "Estas serán sus armas, conde".Aunque Beuter no especificó de qué emperador Luis se trataba, la imaginación popular rápidamente la asimiló a Ludovico Pío, que en realidad no vivió en la misma época que el conde Guifré. Por este motivo, cuando la leyenda se extendió rápidamente poco después, se cambió el emperador Luis por su hijo Carlos el Calvo con el objetivo de hacer que la leyenda fuera más verosímil, pues el emperador Carlos sí que fue coetáneo de Guifré el Velloso. Desde la obra de Beuter hasta la versión de Víctor Balaguer (1859) se difundieron siete variantes diferentes de la leyenda del conde Guifré.