viernes, 6 de mayo de 2016

Presidents de la Mancomunitat Catalana (Carlos de Lossada y Canterac)

Carlos de Lossada y Canterac, nacio en 1862 - Muere en Montcada i Reixac (Barcelona) el 19 de octubre de 1936. De familia de tradición militar, era descendiente del general José de Canterac, jefe de las tropas españolas en las guerras de emancipación de América del Sur. Su hermano, también general, José de Lossada y Canterac, heredó el título de conde de Casa Canterac y fue profesor relevante de la academia de artillería.Tuvo actuaciones destacadas en las guerras de Cuba y de África. En 1892 era capitán en La Habana. En 1894 protagonizó un curioso caso, muy comentado en los ámbitos académicos de la época, al solicitar la homologación de su título de capitán de artillería con el de ingeniero industrial, petición que fue rechazada. En 1916 ascendió de coronel a general de brigada. En 1918 fue nombrado comandante general de artillería de la IV Región Militar que comprendía Catalunya. Más tarde ocupó simultáneamente el cargo de gobernador militar de Girona. En 1921 recibió el ascenso a general de división y en 1922 fue nombrado comandante general de Melilla y participó activamente en las campañas de la guerra de Marruecos. En marzo de 1923 volvió a Barcelona como gobernador militar.Cuando, desde la misma Barcelona, ​​el capitán general de la IV Región Militar, Miguel Primo de Rivera puso en marcha el golpe de estado, el 14 de septiembre de 1923, los gobernadores militares de cada provincia se hicieron cargo del respectivo gobierno civil. Así, Carlos de Lossada tomó posesión del gobierno civil y se convirtió en el brazo ejecutor de las primeras decisiones de la Dictadura en relación con la reforma de las instituciones y la uniformización cultural. Varias entidades catalanistas fueron prohibidas así como la enseñanza en catalán.Siguiendo el plan establecido de depuración de instituciones, el 17 de enero de 1924 tomó posesión del cargo de presidente de la Mancomunitat de Catalunya, sucediendo así a Josep Puig i Cadafalch que había ido a Francia la Navidad anterior. El mismo día convocó reunión de la asamblea de la Mancomunidad para el día 30 de enero. En esta asamblea, que presidió, propuso como nuevo president a Alfons Sala, hombre de confianza del nuevo régimen, que fue proclamado el mismo día.A partir de estos momentos, la Mancomunitat se fue desmantelando hasta que, en marzo de 1925, desapareció por efecto del Estatuto Provincial promulgado por Primo de Riverael septiembre de 1924 Carlos Lossada fue nombrado gobernador militar del Campo de Gibraltar hasta febrero de 1925, cuando pasó a la reserva, retirándose en Barcelona.En julio de 1936 se produjo el levantamiento militar que degeneraría en la Guerra Civil Española. En Barcelona, ​​la rebelión fue sofocada, pero se desencadenó un período de confusión y violencia en el que las llamadas patrullas de control se dedicaron a eliminar posibles afectos a la insurgencia.El 19 de octubre el general Lossada, con 74 años, fue detenido y conducido al cementerio de Montcada i Reixac donde fue ejecutado. La familia no tuvo ninguna noticia de su fin hasta que, en terminada la guerra, el 9 de agosto de 1940 sus restos fueron identificadas y pudo ser enterrado en Barcelona

Presidents de la Mancomunitat Catalana (Josep Puig i Cadafalch)

Josep Puig i Cadafalch, nacio en Mataro el 17 de octubre de 1867 - Muere en Barcelona el 23 de diciembre de 1956. Fue un arquitecto español, uno de los más importantes del modernismo catalán. Estudió Arquitectura y ciencias exactas en Barcelona, y cuando terminó volvió a Mataró, donde asumió el cargo de arquitecto municipal teniendo sólo 24 años de edad. Permaneció en ese puesto durante cinco años, periodo en el que construyó también sus primeros edificios en Mataró.
Posteriormente Puig fue nombrado catedrático en la Escuela de Arquitectura de Barcelona, en las especialidades de hidráulica y de resistencia de materiales. En 1917 asumió el cargo de Presidente de la Mancomunitat de Catalunya, desde donde elaboró un ambicioso plan de enseñanza y cultura e impulsó las excavaciones arqueológicas de Empuries (Girona). También hizo que se construyeran nuevas carreteras y que se desarrollase la agricultura. En 1923 fue destituido y sustituido por Alfons Sala.
Puig fue discípulo de Lluís Domènech i Montaner, y se le considera el último representante del modernismo y el primero del novecentismo. Según algunos expertos, su obra puede dividirse en estos tres periodos diferentes. En la "manzana de la discordia" del Paseo de Gracia de Barcelona se encuentra la Casa Amatller, con su distinguible perfil escalonado, obra de Josep Puig i Cadafalch. A su derecha, la Casa Batlló, de Gaudí.
- El primer periodo es modernista. El arquitecto utiliza como modelo la casa de campo de la aristocracia catalana, a la cual añade elementos de inspiración nórdica. A este periodo pertenecen edificios como la Casa Amatller, la Casa Martí y, en especial, la Casa de les Punxes o Casa Terradas. Todos estas obras fueron realizadas entre 1895 y 1905.
- El segundo periodo se puede definir como de idealismo racional, una tendencia arquitectónica basada en los gustos de la nueva alta burguesía. Los edificios son diseñados con criterio más racional y práctico. Son representativas de este periodo la Casa Trinxet, la Casa Muntades y la Casa Company.
- El tercer periodo es monumentalista, y se desarrolla paralelamente a la preparación y la celebración de la Exposición Internacional de Barcelona (1929), de la que Puig fue el arquitecto principal. En esta etapa creativa los edificios están inspirados en la arquitectura romana, que no obstante se combina con elementos típicos de Valencia y Andalucía. Las paredes son amarillas, y se utilizan numerosas columnas como elementos estructurales. De todo ello resulta un atractivo estilo neo-barroco.

Puig mostró gran interés por la arquitectura estadounidense, y llegó a diseñar un edificio, la Casa Pich, inspirado en la obra del arquitecto estadounidense Louis Henry Sullivan. Además de su trabajo como arquitecto, realizó una importante labor como historiador especialista en arte y ecribió varios ensayos sobre la arquitectura románica y gótica en Catalunya, así como numerosos libros. Durante la Guerra Civil Española se exilió en París y dio clases magistrales sobre arquitectura e historia en numerosas universidades, lo que le valió el reconocimiento internacional. Puig recibió el título de doctor honoris causa por varias universidades, entre ellas la de París. Al regresar a España se encontró con que el nuevo régimen político no le permitía ejercer de arquitecto, por lo que sólo pudo rehabilitar y restaurar edificios y monumentos históricos. En 1942 fue nombrado presidente del Instituto de Estudios Catalanes, cargo en el que permaneció hasta su muerte. Falleció en su residencia de Barcelona a la edad de 89 años

Presidents de la Mancomunitat Catalana (Enric Prat de la Riba)

Enric Prat de la Riba i Sarrà, nacio en Castellterçol (Barcelona) el 29 de noviembre de 1870 - Muere en Castellterçol el 1 de agosto de 1917. Fue un político y escritor de pensamiento catalanista. Expuso su doctrina política en su libro "La nacionalitat catalana". Comenzó sus estudios de derecho en la ciudad de Barcelona y se doctoró en dicha especialidad a los veinticuatro años, en la Universidad Central de Madrid. A partir de 1887, fecha de su ingreso en el Centro Escolar Catalanista, donde surgió una de las primeras definiciones del catalanismo, empieza a militar en diversas organizaciones políticas defensoras de la identidad propia de Catalunya. Tuvo cargos de responsabilidad en la Unió Catalanista. En 1892 fue secretario de la asamblea que redactó las Bases de Manresa, documento que sentaba las bases para la restitución del autogobierno catalán.
En 1899, creó una escisión de Unió Catalanista, al defender la participación del partido en el sistema político de la Restauración. Esta escisión se transformó inmediatamente en el Centre Nacional Català, en donde se integraron futuras personalidades del nacionalismo catalán conservador como Francesc Cambó. En 1901, promovió la fusión de su grupo con la Unió Regionalista para crear la Lliga Regionalista, de la que fue uno de sus principales líderes.
Presidió la Diputacio Provincial de Barcelona a partir de 1907, desde donde creó el Instituto de Estudios Catalanes, del que fue nombrado, en 18 de junio de 1907, primer presidente. Como presidente de la Diputacio de Barcelona, impulsó la creación, el 6 de abril de 1914, de la Mancomunitat de Catalunya, de la que fue el primer presidente, puesto que mantuvo hasta su muerte.
Como catalanista, elaboró diversos manifiestos, entre los que destaca el "Missatge al Rei dels Hel·lens" en 1897. Como divulgador y pensador catalanista escribió Compendio de la doctrina catalanista, Compendio de la "Historia de Catalunya" e impulsó el diario La Renaixença. También es autor de "La racionalidad catalana" (1906), considerada la obra más importante del catalanismo político. Apoyó el intervencionismo de la Liga en la política española; ejemplo de ello es la redacción del manifiesto "Per Catalunya i per l’Espanya Gran" (1916).

Leyendas sobre las flores (Ave del Paraiso)

 Cuenta la leyenda, que en los tiempos de la Colonia y siendo Virrey Mendoza, llega de España Hernán de Montoya, Conde de Barcelona, y se establece en Cuernavaca en la hacienda "El Paraíso". Allí conoce a una linda mestiza llamada Carmen y se enamora perdidamente de ella. Carmen responde también a sus sentimientos y se casan muy enamorados.
Cerca de ahí en otra hacienda, Rodrigo Hernández jura vengarse de Carmen por haberlo despreciado; entonces, finge ser amigo de Hernán y lo visita con demasiada frecuencia. Hernán y Carmen mientras tanto, eran muy felices, la gente que estaba a su alrededor los quería mucho porque sabían ser buenos patrones y amigos. A ellos les gustaba cultivar y arreglar su jardín, que en poco tiempo se hizo famoso por su hermosura.
Mientras tanto, Rodrigo aprovechaba sus visitas para poner un veneno en la comida de Hernán. Él se fue enfermando y murió sin que nadie supiera qué había pasado. Carmen decidió enterrarlo en el jardín que tanto querían. Esa misma noche, en las orillas de la tumba, creció una flor parecida a un ave, pero su color era gris. Cuentan que cada noche, esa flor se convertía en pájaro y volando iba a la hacienda de Rodrigo y le tocaba en la ventana. Rodrigo se llenaba de terror y al no poder soportar estas apariciones se volvió loco.
Carmen no pudo soportar estar separada de su gran amor, y poco a poco murió de tristeza. La enterraron junto a la tumba de su esposo. Esa noche, la flor color gris cambió a color naranja, llena de vida. En la mañana, todos estaban sorprendidos por esa flor llena de vida y de color. Desde entonces, se le conoce como Ave del paraíso. Le pusieron el nombre de ave por la forma de la flor, y paraíso por la hacienda.


Leyendas sobre las flores (La Orquidea)

Cuenta la mágica historia que en una hermosa mañana en la costa de Java una diosa cubierta con un chal se hizo presente. Paseaba en un bosque en el que abundaban robles,  castaños y  sándalos y la luz solar se filtraba delicadamente entre sus ramas.
Al anochecer la femenina figura desapareció y en una de las ramas dejó su prenda. El chal lleno de su  esencia divina se convirtió en una deslumbrante flor, la orquídea tan misteriosa y delicada como la diosa. Ciertos hombres necios incapaces de ver todo lo que transmitía la flor la pisaron y la dejaron en el suelo sin piedad alguna. La planta lógicamente murió.
Pero la diosa no iba a permitir tal injusticia por eso hizo que los restos de la marchita flor se convirtieran en fértiles semillas para que desde ese momento todos los hombres  pudieran admirar a esta  nueva especie y para que aquellos mortales que logran ver más allá de sus propios ojos reconocieran en ella su visita fugaz a la tierra.




Leyendas sobre las flores (La Acacia)

Este árbol forma parte de la leyenda de Osiris y se la asocia con la inmortalidad. Según esta leyenda Osiris a la vez Dios y Rey, era el heredero del reino de Egipto y representaba el lado bueno, la regeneración y la fertilidad de la tierra, mientras que su hermano Seth representaba la aridez, y el lado oscuro. Osiris se casó con su hermana y diosa Isis y después de cumplir su misión en Egipto fue a proclamar sus enseñanzas en otra tierras dejando a cargo de Egipto a Isis. Pero Seth odiaba a su hermano, por lo que mientras Osiris se encontraba en otras naciones confabuló un plan para librarse de él.
En secreto, obtuvo las medidas exactas del cuerpo de Osiris y fabricó un cofre de madera, ricamente adornado, y en el que encajaba perfectamente el cuerpo de su hermano.  Tras el regreso de Osiris, Seth decidió dar un gran banquete en honor a su hermano y, en un momento de la fiesta, Seth ofreció dar el cofre a quien encajara perfectamente en él. Osiris, maravillado por la belleza del cofre, lo probó y viendo que encajaba afirmó: "Encajo y será mío para siempre", a lo que Seth respondió "Tuyo es, hermano, y de hecho lo será para siempre" y cerró la tapa bruscamente, clavándolo y sellándolo con plomo fundido. El cofre fue transportado hasta el Nilo, donde fue arrojado. La caja fue arrastrada por la corriente hasta la costa de la ciudad de Byblos, donde las olas lo lanzaron contra un árbol de acacia, en el que quedó incrustado. El arbusto creció y se convirtió en un grandioso árbol, con el cofre incrustado en su tronco. Pronto se corrió la voz de la grandeza del árbol  y el rey de la zona ordenó construir con él un pilar que sujetara el techo de su palacio.
Isis, enterada de la traición de Seth, se propuso encontrar el cadáver de su marido y partió en su busca junto a su hijo Horus. Isis deambuló por toda la Tierra en busca del cuerpo de Osiris, preguntando a todos los que veía, hasta que unos niños que jugaban en la ribera del río, le dijeron hacia adonde había ido el cofre. Isis se ofreció a cuidar al hijo del Rey y como pago solo pidió una cosa: el gran pilar de acacia que sujetaba el palacio. Cuando se lo ofrecieron, Isis lo abrió y tomó el cofre que estaba dentro y, al abrir la caja, encontró el cuerpo de Osiris perfectamente preservado.
Este dios sagrado muere cada año cuando las plantas se marchitan, solo para renacer de nuevo en primavera. Al transcender la muerte y conseguir la vida eterna, Osiris personificaba la promesa de redención en la otra vida. El fin espiritual de los antiguos egipcios era transcender los límites de la persona y juntarse con Osiris y la acacia era el guardián de esta promesa, porque protegía el cuerpo de Osiris mientras su alma abrazaba el universo.
La acacia era considerada sagrada también por los hebreos antiguos; se dice que Moisés usó madera de acacia para construir el Arca de la Alianza (donde se guardaban las tablas de la ley) , el Tabernáculo sagrado, y el altar. También hay una creencia que sostiene que fueron espinas de acacia las que se usaron para la corona de Jesús.