lunes, 15 de febrero de 2016

Leyendas en Catalunya (Francesca Saperas Miró)

Francesca Saperas Miró, nacio en Barcelona, ​​12 de febrero de 1851 a 21 de agosto de 1933, fue una militante anarquista y anarcosindicalista catalana. Abuela de Antonia Fontanillas Borràs.En 1869 se casó con el zapatero anarquista Martín Borrás y Jover, primer director de la revista Tierra y Libertad y de la Justicia Humana, y también secretario dirigente de la Unión de Constructores del Calzado de la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT). En 1889 participó en la organización de un mitin en la plaza de Cataluña de Barcelona que no se llevó a cabo para que la policía detuvo a los organizadores. Martín Borrás fue detenido a raíz del intento de asesinato de Arsenio Martínez Campos en la Gran Vía de Barcelona por Paulino Pallás y Latorre en septiembre de 1893. Fue encarcelado en el castillo de Montjuïc y se suicidó en 1894 después de despedirse cariñosamente de su mujer por carta. Contribuyó a la causa acogiendo anarquistas perseguidos y convirtió su casa en la calle Tallers de Barcelona en un refugio. De esta manera mantuvo una relación sentimental con Tomás Ascheri, quien en 1897 sería condenado a muerte y ejecutado después del proceso de Montjuïc bajo la acusación de ser el responsable del atentado de la calle de los Cambios Nuevos. En 1897 fue desterrada en Francia, donde participó activamente en la campaña internacional contra los procesos de Montjuïc, y en 1898 en volvió.Más tarde se unió a Francisco Callís Calderón, uno de los torturados en el proceso de Montjuïc, que también se suicidó. Entre 1912 y 1914 vivió en Buenos Aires (Argentina) con su yerno José Fontanillas. Volvió a Barcelona, ​​pero de 1919 a 1923 se instaló en México. En 1923 volvió a Barcelona definitivamente y vivió con Teresa Claramunt. Su salud quedó afectada por la parálisis y en 1929 se organizó una comisión para ayudarla. Murió en 1933 en Barcelona

Leyendas en Catalunya (Celedonio García)

Celedonio García Casino, alias "Celes" o "El Llarg", nacio en Barcelona, el ​​25 de diciembre de 1922 - fallece el 26 de agosto de 1949, fue un anarquista y guerrillero antifranquista catalán.Tras la victoria franquista en la guerra civil española, con sólo 17 años, decidió participar en la lucha antifranquista, entrando en las Juventudes Libertarias. El 14 de junio de 1939 fue detenido junto con otros 16 compañeros por propaganda subversiva, posesión de armas y pertenencia al Comité Regional de Catalunya y las Islas Baleares de la Federación Ibérica de Juventudes Libertarias.Un año más tarde fue encerrado en la cárcel Modelo de Barcelona, ​​donde entró en contacto con el secretario del Comité de Peninsular de la Federación Anarquista Ibérica, Manuel Aguilar Martínez. En la cárcel, Martínez formó tres grupos que más tarde participaron en la lucha armada clandestina: uno de estos grupos lo formaban García Casino, Manuel Graupera Rodilla, Ángel Bernal Lozano, Blas Fuster Carreter y el responsable del grupo, Enrique Laborda Gómez.Celes fue liberado el 23 de noviembre de 1945 e inmediatamente reanudó los contactos con la FIJL, con la que se reunió en el Congreso de 1946 en Toulouse. Ese mismo año fue nombrado Secretario de Defensa del Comité Regional de Catalunya y las Islas Baleares de la Federación Ibérica de Juventudes Libertarias (otro compañero que había ocupado esa posición era Josep Lluís Facerías).En 1947, García Casino participó en el Movimiento de Resistencia Libertaria, una formación pensada como brazo armado del anarcosindicalismo, pero de vida corta; participó en este movimiento en un ataque con explosivos contra un cuartel de la Guardia Civil, una acción que los comunistas intentaron reclamar como propia.El MLR era una oportunidad para fortalecer la asociación con Facerias, quien en 1947 fue uno de los primeros grupos de expropiación y ataque. Además de Celesíria, en este grupo también formaron parte Juan Cazorla Pedrero, Ramón González Sanmartí, Francisco Ballester Orovitg y Domingo Ibars Juan. Entre las acciones de expropiación llevadas a cabo por el grupo, hay que recordar al menos el atraco al Banco de Bilbao de la calle Mallorca y el Banco de Vizcaya de la calle Rocafort, ambas en Barcelona.El 26 de agosto de 1949 la guardia civil sorprendió en una emboscada Celedonio y de otros compañeros que estaban tratando de llegar a Francia. Sólo pudieron escapar de la emboscada Facerias y el poumista pro-anarquista Antoni Franquesa y Funoll; perdió la vida Enrique Martínez Marín, dijo Quique (no confundir con Quico Sabaté) y Celes, quien fueron enterrados en el cementerio de Espolla, en Girona. Celes dejó su compañera, Remedios Falceto, y la pequeña Olga. Remedios continuó su militancia en la sección de las Juventudes Libertarias del barrio del Carmel. 



Asesinos en Serie (Henry Desire Landrú [IV])

Los debates eran seguidos con pasión, ya que si bien nadie ponía en duda la culpabilidad del acusado, tampoco había ninguna prueba formal. No se encontró ningún cadáver ni de las diez novias ni el del hijo de la señora Cuchet. Las osamentas humanas reducidas a cenizas, encontradas en la cocina, eran solamente 996 gramos. Había grandes conjeturas, pero ningún testimonio.
El abogado de Désiré, el señor de Moro-Giafferi, a pesar del talento demostrado, no logró salvar a su cliente. Sin embargo, las últimas palabras que Landrú le dirigió a su defensor fueron: “Le he confiado una causa bien difícil… digamos desesperada… En fin, no es la primera vez que condenan a un inocente”. Ante el escepticismo del señor Moro-Giafferi, añadió: “Sí, maestro, digo bien: inocente”.
Después de tres semanas de proceso, Landrú fue condenado a muerte la madrugada del 22 de febrero de 1922. La cabeza del "Señor de Gambais" rodó a las puertas de la cárcel de Versalles.

Si bien se llegó a especular en cifras exageradas que Landrú pudo asesinar a casi 300 mujeres, el secreto de sus asesinatos se enterró con él, pues en ningún momento reconoció su culpa ni dió ningún tipo de pista que pudiera esclarecer su caso. En todo caso con casi total seguridad estos nombres que a continuación se citan pertenecen a las "hazañas" de tan frío asesino.
  • Sra. Cuchet, viuda, 39 años y su hijo de 17 años.
  • Sra. Laborde, viuda, 46 años.
  • Sra. Guillin, 51 años. Fea, pero con una herencia de 20,000 francos.
  • Sra. Héon, la primera que fue a Gambais.
  • Sra. Collomb, viuda, 39 años.
  • Andrée Babelay. La excepción, 19 años, guapa y sin dinero, no fue reclutada por anuncio sino en un encuentro casual en el Metro.
  • Sra. Buisson. Virtuosa que tardó dos años en ceder.
  • Sra. Jaume. Muy católica, aceptó las proposiciones de Landrú tras la oferta de matrimonio.
  • Sra. Pascal. Joven y guapa. Antes de irse a Gambais le escribió a su tía: "No sé lo que hay en él, pero me asusta. Su mirada ceñuda me angustia. Parece el diablo".
  • Sra. Marchadier. Antigua prostituta. Partió a Gambais acompañada de sus tres perros que también desaparecieron sin dejar huella.
fuente:  http://www.asesinos-en-serie.com


Asesinos en Serie (Henry Desire Landrú [III])

Pero, como nada es eterno, a Landrú se le acabó la suerte cuando los familiares de las desaparecidas comenzaron a mostrar preocupación. Los primeros, fueron los parientes de la señora Collomb, la quinta novia de Désiré, quienes escribieron una carta al alcalde de Gambais para pedir noticias de la joven y de un tal señor Dupont con quien había sido vista por última vez. Poco después fue la familia Buisson la que buscaba a la que fue la séptima novia de Landrú y a quien acompañaba un tal Frémyet en Gambais. El alcalde nunca había oído el nombre de Frémyet, pues fue Dupont (Landrú) el que alquiló "La Ermita".
La Policía abrió una investigación de inmediato y se dio a la difícil tarea de localizar a un hombre calvo, con barba negra y de estatura mediana. Con esta vaga descripción, fue el azar el que permitió que la hermana de la señora Buisson se cruzara con Landrú el mismo día que se presentó la denuncia. Lo vio en una tienda de la Rue de Rivoli comprando porcelanas, acompañado de una nueva víctima: Fernande Segret. La Policía interrogó al comerciante y encontró que Désiré había dejado su tarjeta "Lucien Guillet, 76, Rue Rochechouart".
Para el 13 de abril de 1919, "Le Petit Journal" publicaba un artículo con la detención de Landrú en el que informaba a sus lectores, que éste estaba inculpado de robos con agravantes y de estafas y que durante varios años se ocultó con nombres falsos. Además, el diario sentenció: "pero cargos más graves pesarán sobre él".
Los guardias se trasladaron a Gambais. Descubrieron la cocina, el cobertizo donde Désiré amontonaba la ropa y los muebles de sus víctimas. Encontraron además, osamentas humanas calcinadas. Pero las pruebas convincentes fueron sus ficheros y la libreta en la que anotaba, con una meticulosidad asombrosa de ahorrador compulsivo, los precios de los boletos de ferrocarril de París a Gambais.
 El proceso de Landrú duró dos años. El público cambió las preocupaciones de la reciente guerra por el juicio del hombrecito calvo, barbudo y con perfil de pájaro que negaba con calma, bromeaba con cinismo y daba en todo momento muestras de la más delicada cortesía. En su celda estudiaba sus expedientes, recibía obsequios y propuestas de matrimonio por parte de sus admiradoras. En las elecciones de 1919, cuatro mil franceses propusieron a Landrú como candidato.


Asesinos en Serie (Henry Desire Landrú [II])

Landrú utilizó un viejo truco para hacer saber que era un viudo de buena posición que deseaba casarse: simplemente puso un anuncio en los periódicos. Recibió miles de contestaciones. Seleccionó las que le parecieron más interesantes, alquiló una villa aislada en las afueras llamada “Ermitage”, y empezó a hacer contacto con las pretendientes. Atento y encantador se ganaba su confianza, especialmente la de mujeres solitarias, viudas y con algún capital. Y así fueron cayendo una tras otra en la trampa tan hábilmente preparada por el asesino. Después de un breve plazo durante el que gozaba de sus encantos, las convencía para que le dejasen sus ahorros. Luego las mataba, las descuartizaba con una sierra y las quemaba, incinerándolas en el horno de la villa “Ermitage”.
Su primera conquista obtenida por este método fue la de la viuda Jeanne Cuchet de 39 años, quien vivía con su hijo de diecisiete años y cuyos ahorros podían considerarse como consistentes. La señora Cuchet tenía una necesidad urgente de afecto y para Landrú, -con su exquisita cortesía y su aspecto de “caballero”-, no le fue difícil seducirla. Su primera identidad fue la de Diard, inspector de correos, proveniente de Lille debido a la ocupación alemana. No sólo le prometió matrimonio, sino que además ofreció conseguirle al joven Cuchet un empleo estable y con futuro en la administración. La viuda aceptó y se fue con él al apartamento que Désiré previamente había alquilado en Vernouillet. Madre e hijo desaparecieron sin dejar rastro.
Cuando a Landrú le pareció que el apartamento en Vernouillet ya no presentaba las garantías necesarias de discreción, lo abandonó y se fue a rentar una pabellón llamado “La Ermita” en Gambais, lugar ideal para esconder sus amores.
Désiré hacía sus conquistas en París y de vez en cuando pasaba los domingos en Gambais. Llevaba una vida casi normal. Visitaba a sus hijos con frecuencia, mostrándose con ellos como padre atento y a su esposa le regalaba joyas de las cuales nunca le explicó su procedencia.


Asesinos en Serie (Henry Desire Landrú [I])

Henry Desire Landrú, nació París (Francia) el 12 de abril de 1869 -  Fallece en Versalles (Francia) el 25 de febrero de 1922, también conocido como el "Barba Azul de Gambais". Hijo de un modesto industrial y de una costurera, su infancia transcurrió entre sus estudios y la religión. Cuando tenía alrededor de 20 años tuvo que casarse con una prima que esperaba un hijo suyo. Poco tiempo después de su matrimonio, partió a la guerra a cumplir con sus obligaciones militares.
Entre 1902 y 1914, algunos delitos menores le valieron tres penas de cárcel sucesivas, lo que acarreó que su padre, avergonzado por el comportamiento de su hijo, se quitara la vida. 
Para Landrú, cuya inclinación a la estafa ya había desencadenado la muerte de su padre, la Gran Guerra de 1914-1918 le proporcionó la oportunidad de refinar este talento. Y es que, las bajas que a diario se producían en el frente de batalla, aumentaban constantemente el número de viudas, quienes colocaban en los periódicos anuncios matrimoniales. Esta lectura fue para Désiré una revelación. Comprendió que un hombre como él, atractivo y joven aún, podía aprovecharse de esta situación.
Desde 1914, Landrú hizo publicar en los diarios un anuncio que decía: “Señor serio desea casarse con viuda o mujer incomprendida entre 35 y 45 años”. Como es de suponerse, recibió gran cantidad de cartas que organizó con esmero para estudiarlas y clasificarlas posteriormente.
Las fichas de las candidatas apuradas llevaban la anotación S.F. (sin fortuna), las cuales eran descartadas de inmediato por el ambicioso Landrú; a las otras, les enviaba una respuesta para recoger más información y asegurarse de la rentabilidad del idilio. Llamado "El Moderno Barba-azul" fue uno de los asesinos más famosos de Francia. Utilizaba su encanto para ganarse el corazón de docenas de mujeres solitarias. Ellas querían casarse; él quería su dinero y sus vidas para garantizar su silencio.