miércoles, 26 de agosto de 2015

Misterios en la Peninsula Iberica (Belchite[II])

Belchite se ha convertido en un pueblo abandonado, maldito, fantasma... Y sin lugar a dudas, es el más visitado de España, pues sus ruinas son visitadas todos los años por más de diez mil personas. Algunas como homenaje o recuerdo de lo que sucedió allí, otras como simple visita turística y otras muchas, atraídas por las leyendas que cuenta que las almas de los que allí murieron, todavía caminan por sus calles.

 Comienza la Leyenda
La primera noticias sobre ocupación humana en la zona de Belchite es la de la "Cueva de los Encantados", de gran  valor arqueológico y espeleológico, y fue descubierto en la década de los 70. Los valiosos restos metálicos y cerámicos (campaniforme) permiten datar su momento de uso entre el 1800 al 1300 a.C., en la Edad del Bronce antigua y media. Sin embargo, no es hasta la Edad del Hierro final cuando se ha podido constatar una presencia humana de importancia en este territorio. Es en este momento cuando se desarrollan una serie de asentamientos importantes, entre ellos alguno que pudo haber alcanzado la categoría de ciudad. Ciudad Ibera por excelencia, se vio influenciada por las distintas "colonizaciones" que invadieron España: los romanos, los pueblos barbaros y el islam.
Pero Belchite se convierte en una ciudad peregrina, a partir del s.XX y en la década de los 60. Después de la devastación del pueblo por el ejercito republicano, los habitantes de la zona abandonaron el pueblo. Una vez finalizada la Guerra Civil, Franco prometió la reconstrución de este enclave, pero seria en una zona cercana. Franco y sus secuaces, querian que Belchite Viejo, fuera una memoria para los vencedores. El pueblo fue reconstruido y se utilizo la mano barata de los vencidos.

Poco a poco las leyendas sobre Belchite fueron creciendo, la historias sobre humanos y voces que se paseaban en la oscuridad, convertieron esta ciudad en un centro de peregrinaje para las personas avidas sobre sucesos paranormales, psicofonias, espectros...
Existe un Belchite subterráneo, ya que durante la guerra, la gente comunicó con túneles las bodegas de las casas para esconderse y poder comunicarse sin riesgo. Bajo tierra, podría haber documentos y objetos de valor histórico sobre el pueblo, la guerra y la vida cotidiana durante el conflicto. Los que han atravesado sus calles polvorientas lo han sentido, es como si el tiempo se hubiese detenido. Incluso imaginas que en cualquier momento unos niños salgan corriendo de uno de los caserones destruidos, y es que aun se siente vida en el pueblo.
Para muchos investigadores de lo paranormal, el viejo Belchite, es el lugar perfecto para realizar psicofonias, que se pueden grabar no solo por la cantidad sino por su calidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario