
En respuesta a la tesis de la defensa de
que el acusado es un enfermo mental incapaz de entender sus acciones,
la fiscalía solicitó se aplicaran numerosos análisis psicológicos, en
los cuales se determinó que: Donato Bilancia lejos de estar loco está
muy sano de mente, es consciente de todo lo que hace y actúa con verdadera determinación y frialdad.
Finalmente, el 14 de febrero de 2001 el
Tribunal de Apelación de Génova lo sentenció a 13 cadenas perpetuas y 26
años de reclusión, tras confesarse el autor de 18 homicidios.
fuente: http://www.asesinos-en-serie.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario