Cuenta la leyenda que en el mismo lugar donde se ubica la iglesia gótica Sants Màrtirs Just i Pastor había
un templo pagano dedicado al dios persa Mitra, cuya representación más
conocida es la de un joven sacrificando a un toro. Una matanza que nada
tiene que ver con el sacrificio que llevaban a cabo los devotos de
aquella religión, siempre hombres, que asistían al templo: en lugar de
toros, aniquilaban cristianos, cuyos cadáveres eran arrojados al llamado
pozo de los Sacrificios, ubicado en la plaza de Sant Just. A raíz del
descubrimiento de antiguos conductos subterráneos, empezaron las
elucubraciones que aseguran que aquellos túneles fueron utilizados por
los familiares de las víctimas para rescatar los cuerpos de los
sacrificados y que convirtieron aquellas antiguas cloacas en catacumbas,
donde se celebraban misas y se enterraba a los muertos.
http://www.lavanguardia.com/local/barcelona/20161020/411125850457/anecdotario-de-barcelona-roser-messa-pep-brocal.html
http://www.lavanguardia.com/local/barcelona/20161020/411125850457/anecdotario-de-barcelona-roser-messa-pep-brocal.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario