jueves, 28 de julio de 2016

Historia de Catalunya (La Coronela de Barcelona [X])

Al asumir el mando general del Ejército de Catalunya, el teniente mariscal Antonio de Villarroel sugirió reformar "la Coronela" para hacer más funcional y el 2 de agosto se aprobó la nueva escala de la Coronela. Se reorganizó reduciendo de 9 a 6 el número de batallones, siendo cada uno puesto bajo el amparo de un "santo patrón" o de un "misterio católico". Cada uno de los batallones contaba con 7, 8 o 9 compañías, totalizando 47 compañías, que luego fueron 48 por partición de la 3ª compañía del II Batallón. Cada compañía disponía de capitán, teniente, alférez, 2 sargentos y 4 cabos:
- I Batallón "Santísima Trinidad"
- II Batallón "Inmaculada Concepción"
- III Batallón "Santa Eulalia"
- IV Batallón "Santa Madrona"
- V Batallón "San Severo"
- VI Batallón "Virgen de la Merced"

Bando de reorganización de las Escuadras de Cuartos en septiembre de 1713. A finales del asedio, en 1714 y dadas la bajas entre las tropas de la "Coronela de Barcelona", el conseller en Cap Rafael Casanova ordenó que los Batallones de Cuartos fueran agregados a la "Coronela".

Los consellers de Barcelona pugnaron por otorgar a "la Coronela" un creciente protagonismo; durante el bloqueo y asedio de 1713-1714 el conseller en cap Rafel Casanova propuso reiteradamente que participara en las salidas contra el cordón de bloqueo borbónico; para tal fin se intensificaron las prácticas de instrucción militar y de maniobra en orden cerrado. No obstante, el general comandante Antonio de Villarroel siempre se negó a implicar a "la Coronela" en operaciones exteriores. Cuando finalmente entró en combate, durante los asaltos borbónicos contra la ciudad en agosto de 1714, "la Coronela" se rebeló como una potentísima fuerza de combate, equiparable a la tropa reglada del Ejército de Catalunya

En una situación de bloqueo, con refugiados de diversas procedencias, casas en ruinas por los bombardeos y una carestía de víveres creciente, la seguridad pública fue un problema significativo. Para mantener el orden público dentro de la Ciudad se levó la "Compañía de la Quietud", y así mismo se levaron las compañías de voluntarios, formadas por barceloneses que no estaban a sueldo pero que servían voluntariamente con armas propias, sin patente oficial y sin uniforme. Y finalmente, aquellos civiles inhábiles para el servicio de armas, fueron movilizados el 1 de agosto de 1713 en las "Escuadres de Cuarts" (después llamados "Batallons de Barri), formados por ciudadanos que sin recibir paga alguna tenían por cometido servir de fuerza de trabajo, desescombro y reconstrucción en caso de bombardeo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario