martes, 28 de junio de 2016

Historia de Catalunya (Los Comtes de Barcelona [Borrell II])

Borrell II [II]

A pesar de los esfuerzos diplomáticos del conde de Barcelona, los condados de la "Gothia" no se libraron de las razias de Almanzor. El 5 de mayo de 985 un ejército partió de Córdoba cruzando el litoral mediterráneo en dirección al campo de Tarragona. Almanzor avanzó a sangre y fuego hacia Barcelona por las actuales comarcas catalanas del Penedés, Llobregat y Vallés, mientras el conde Borrell II organizaba a la desesperada la defensa de sus territorios. Monestirs de los alrededores de Barcelona como Sant cugat, Sant Pau del Camp o Sant Pere de las Puel.les fueron destruidos y sus comunidades asesinadas.

Acto seguido, los aterrados habitantes de las cercanías de Barcelona se encerraron tras las murallas de la ciudad condal, que fue asediada el primero de julio. La resistencia duró poco, el lunes 6 de julio Almanzor arrasó Barcelona llevándose consigo un cuantioso botín y un elevado número de cautivos que más adelante serían vendidos como esclavos o rescatados a cambio de importantes sumas de dinero. El conde Borrell II había sufrido una derrota difícil de olvidar, y las crónicas bautizaron este triste suceso como "el día que Barcelona murió". Quedaba así demostrado que la posición procordobesa mantenida por el conde había fracasado.
Fruto de estos continuados ataques en los años 978, 982, 984 y 985, fue preciso el abandono de la ciudad de Tarragona, que no volvió a ser ocupada de forma definitiva hasta 1118, por parte del conde Ramón Berenguer III.

Efectivamente, la traumática experiencia obligó al conde Borrell II a intentar retomar las relaciones con los francos. Ofreció al rey Lotario la renovación del juramento de fidelidad a cambio de auxilio militar que garantizase la protección del país frente a nuevos ataques musulmanes. Pero la petición de ayuda coincidió con una grave crisis de la dinastía Carolingia, Lotario murió en 986 y su sucesor Luis V "el Holgazán" también falleció prematuramente en 987. La nueva dinastía de los Capetos tuvo que defender la corona franca de insurrecciones internas y tampoco atendió las peticiones de auxilio del Comte barcelonés.
Dado que nadie respondió a la demanda de auxilio del conde Borrell II, no es de extrañar que cuando en 987 el rey Hugo I Capeto exigió renovar los vínculos políticos con la corona franca la respuesta fuera un mutismo total, de tal manera que ese fue el último contacto exigiendo la subordinación de los condes de la "Gothia" a los monarcas francos. Era la independencia de facto de la dinastía condal de Barcelona, no reconocida jurídicamente hasta la firma del "Tratado de Corbeil" siglos después, ya en 1258.

Por lo que respecta a las relaciones con la Santa Sede, la intención de Borrell II era crear un nuevo arzobispado en Vic que agrupara los obispados de la Gothia, mientras Tarragona estuviera en manos musulmanas. Si el Comte de Barcelona conseguía su propósito, sometería a su control las autoridades eclesiásticas de la Gothia y, a su vez, rompería los lazos con el arzobispado de Narbona, bajo influencia franca. Parece ser que el papa Juan XIII acogió favorablemente las propuestas que le expusieron el obispo Ató de Vic, el monje Gerberto de Aurillac y el propio Borrell II en su viaje a Roma 970. Pero el asesinato del obispo el 22 agosto de 971 frustró una tentativa que mostraba la clara voluntad de afirmación política y religiosa del Comte barcelonés.

A partir de 988 compartió el gobierno con sus hijos Ramón Borrell el primogénito, quien recibió el grupo de Comtats de Barcelona, Girona y Osona, y Ermengol el hijo menor, a quien legó el condado de Urgell. Ambos comenzaron a gobernar en solitario en 992, año en que se supone que falleció Borrell II.

No hay comentarios:

Publicar un comentario